“La respuesta a cualquiera que hable de
«exceso de población» es preguntarle si él mismo
es parte de ese exceso de población,
o si no lo es, cómo sabe que no lo es”.
Gilbert Keith Chesterton
Por: Emilio Guerra Díaz
En México desafortunadamente no se da mucha importancia a los datos, pese a que son materia prima para la medición y evaluación del trabajo realizado. Cuesta mucho esfuerzo vincular información con esos datos, por ejemplo, la aportación que hacen las fundaciones empresariales respecto a los beneficiarios.
Por citar un ejemplo un tanto desconcertante: Hace algunos años una afamada revista de negocios publicó un número espacialmente dedicado a las 50 fundaciones empresariales más importantes en México. Los criterios de selección apuntaban no al impacto de su contribución sino principalmente al volumen del dinero que manejaban. El estudio incluyó la comparación entre ellas a partir de varias categorías. Una de ellas era “cobertura o población atendida”, ya fueran beneficiarios directos o indirectos.
Si el lector sumaba los datos que cada fundación proporcionó, o bien que el investigador obtuvo para el reportaje respecto al número de personas beneficiadas, el resultado era sorprendente: la contribución de esas organizaciones rebasaba la cantidad de 50 millones de beneficiarios. Conclusión: Tan sólo media centena de instituciones filantrópicas atendían más personas que los programas públicos y se podía inferir que podrían terminar con la pobreza si seguían con esta tendencia.
Desde luego a las fundaciones empresariales les falta mucho saber evaluar su impacto, como lo señalan los datos preliminares de la indagatoria que realiza el Centro de Investigación y Estudios sobre Sociedad Civil, cuyos resultados finales están por aparecen en breve.
El tema demográfico no ha sido ajeno al sector filantrópico. En la década de los sesenta se fundó la Fundación Mexicana para la Planeación Familiar (conocida como MEXFAM) pionera en ofrecer metodología anticonceptiva en el país. Entonces tuvo que realizar un trabajo de bajo perfil por las mentes conservadoras que se oponían a promover el control de la fecundidad de mujeres.
La demografía, estudio del comportamiento de la población respecto a su crecimiento o decrecimiento es fundamental para la planeación tanto de políticas públicas como de programas sociales que lleven a cabo las dependencias públicas o las organizaciones filantrópicas.
Como sociólogo sé que es implícito abordar sus variantes y en la formación profesional se incluye el tema del crecimiento poblacional de manera obligatoria. En mi caso particular fruto de mi tesis, en 1991 la UAM-Xochimilco publicó mi libro “La política de planificación familiar en México, una experiencia reciente”, (UAM-X, 1991) donde se apuntaban las tendencias respecto al crecimiento poblacional y la necesidad de darle un enfoque femenino a las políticas públicas que se vinculan entre sí.
El tema poblacional es indispensable para el acto de gobierno y por ello los países adoptan una política pública respecto a su crecimiento o decrecimiento. Los casos más sonados son las políticas públicas antinatalistas como la de China, que estipula que las parejas solo pueden tener un hijo sin recibir sanciones o la India que rebaza más de 1 mil millones de habitantes. O países que por tener población avejentada incentivan a que las parejas tengan hijos, es el caso de Francia.
Pero vaya lío en que se metió Rosario Robles respecto a sus declaraciones desafortunadas del apoyo que puede dar el Programa Oportunidades a mujeres con más de 3 hijos. Es una limitación del programa desde 2009, criterio sentado por una administración federal panista.
Las posiciones entre izquierda y derecha respecto al crecimiento poblacional o el control de la natalidad difiere diametralmente. Por ejemplo, la derecha se identifica con el postulado de traer al mundo “los hijos que Dios te dé”; la izquierda se autocalifica de liberal y ha impulsado la interrupción del embarazo en la capital del país y ahora se promueve una reforma similar en Guerrero. Es justo decir que inadecuadamente algunos de sus simpatizantes consideran a la interrupción del embarazo como un recurso para la no concepción y un derecho de la mujer, pero no del feto.
¡Ah pero cómo son las contradicciones de la vida! Rosario Robles, mujer de izquierda, aparece como una censora respecto al número y espaciamiento de los hijos. La secretaria de Sedesol en realidad señaló su preocupación por ver a niñas de 12 o 13 años que ya son mamás. Ellas no eligieron ser madres, sino por sus condiciones sociales (de pobreza y marginación) se han visto en una dinámica de exclusión que modifica su sexualidad siendo objeto del abuso por parte de los varones.
Recordará el lector que el cambio radical de la política de población en México se dio en 1973 cuando pasó de ser una posición pro natalista a lo contrario: una antinatalista. Así se pasó en el mismo sexenio, el de Luis Echeverría Álvarez, de su lema de campaña: “Gobernar es Poblar”, a “La familia pequeña vive mejor”. Rosario Robles remembró el viejo slogan y ahora la quieren linchar.
En México atravesamos una inercia poblacional que se explica por la ausencia de una política pública de dos gobiernos federales panistas, donde no hubo una continuidad para mantener a la baja el crecimiento poblacional, planteados desde la década de los setenta. Lo más grave de esa ausencia es que no hubo siquiera una estrategia que compensara la visión de “los hijos que Dios te dé” con una mejora real de la calidad de vida de la población. Es sabido que la tasa de fecundidad se diferencia en cada país pero hay rasgos comunes. Ésta es más alta en grupos de mayor pobreza, mientras que mujeres con mayor acceso a la educación tienen menos hijos.
La ausencia de oportunidades para mujeres, alternativas para el conocimiento de su cuerpo y del libre ejercicio de su sexualidad con responsabilidad respecto a la maternidad hoy se traduce en el fenómeno que advierte Robles: millones de niñas y pre adolescentes, mucha de ellas ya tienen 2, 3 y hasta 4 hijos antes de cumplir los 24 años de edad. Ese descuido o inacción panista respeto al crecimiento poblacional hoy significa al menos 10 millones más de compatriotas que demandan servicios públicos y empleos.
Lo curioso es que fueron los propios panistas quienes fueron a denunciar a Rosario Robles de “discriminación” ante la PGR por su accidentada declaración. La funcionaria ex perredista aclaró su comentario. En Radio Fórmula con Joaquín López Dóriga reconoció su equivoco, pero ratificó sus palabras: Es doloroso ver a niñas de 12 o 13 años que sin ninguna otra opción de vida ya son madres involuntariamente.
Se evidencian en ciertas ocasiones cómo el terreno de la política ofrece recovecos por donde se cuelan las malas intenciones. El programa Oportunidades tiene reglas de operación. Estas fueron estipuladas por gobierno federal panista según consta desde 2009. Sin afán de defender a la titular de Sedesol, ella sigue esa normatividad.
La semana pasada fue publicado en el Diario Oficial de la Federación el Plan Nacional de Población 2014-2018. En él se señalan dos datos importantes: la tasa global de fecundidad es de 2.2 hijos por mujer (lo planeado hace 30 años era sostener una tasa de 1.7) y la tasa neta de crecimiento poblacional es de 1.13% , que ya debería ser menor al 1%.
En síntesis, los dos sexenios panistas se caracterizaron por una ausencia de control de natalidad efectivo con la inercia que tuvieron los gobiernos priistas y esfuerzos parciales para ofrecer información sobre su sexualidad a jóvenes para la toma de decisiones sobre su paternidad o maternidad. Conapo bajo los gobiernos de Fox y Calderón fue una oficina de monitoreo y brilló por su ausencia, ni siquiera tuvo spots televisivos y mucho menos una campaña en medios de comunicación. Los esfuerzos de brindar metodología anticonceptiva fueron marginales y laterales.
Por lo anterior, las fundaciones empresariales tienen la oportunidad de incorporar a sus convocatorias y programas el conocimiento y manejo adecuado de cobertura poblacional. Respecto al apoyo a la mujer se pueden establecer ciertas líneas estratégicas como apoyar proyectos de autoestima y proyecto de vida; generación de ingresos para madre e hijas; talleres de masculinidad y vida en pareja; fomentar oportunidades escolares con continuidad para el género femenino; brindar información sobre sexualidad responsable y acceso a servicios de salud.
Desde el Consejo Directivo
La Semana Internacional de Voluntariado Corporativo y el Give and Gain Day 2014 se está llevando a cabo justo en estos días. Por ello la oportunidad de OSC y empresas que tienen un voluntariado para trabajar juntas es más fértil que nunca, señaló el Presidente del Consejo Directivo. Recomendó asistir a la conferencia que ofrece la AFP que se dictará este viernes 16 de mayo en la sede de la Universidad La Salle, de 9:00 a 12:00 horas ya que podrán entenderse los dos enfoques: el de la empresa al organizar y movilizar sus voluntarios y las actividades que realizan las organizaciones filantrópicas que requieren de ese servicio para ampliar su cobertura.
Emilio Guerra Díaz
Emilio Guerra cuenta con amplia experiencia en la Gestión de la RSC, destacando su trabajo en el área de vinculación con la comunidad que potenciar la inversión social empresarial. Ha gerenciado fundaciones empresariales.