Además de justicia social y moral, ¿qué más se ganaría de una mayor equidad entre hombres y mujeres? Según un estudio reciente de McKinsey, nada menos que entre 12 y 28 trillones de dólares a nivel global. El documento, llamado The power of parity: How advancing women’s equality can add $12 trillion to global growth, es un importante argumento a favor de acelerar los procesos que lleven a la equidad.
Según lo descubierto después de medir la inequidad de género en 95 países usando 15 indicadores, la investigación concluye que si cada país igualara la tasa de mejora del país con mejor desempeño en el tema de su región se verían resultados económicos de hasta 12 trillones en el PIB global de 2025 (a lo que se llama un resultado «mejor de la región») mientras que si se lograra acabar por completo con la desigualdad y las mujeres jugaran un rol idéntico al de los hombres en los mercados laborales, se añadirían hasta 28 trillones de dólares al PIB anual dentro de diez años. Este último resultado es llamado «potencial completo.»
Los cálculos se hicieron al ligar el potencial económico a 15 indicadores basados en resultados en cuatro categorías: seguridad física y autonomía, servicios esenciales y facilitadores de oportunidad económica, protección legal y vos política y equidad en el trabajo. Es decir, no se tuvo en cuenta solo el papel que desempañan las mujeres en el ámbito laboral, sino también su contexto general, tomando en cuenta temas como el acceso a salud reproductiva, la representación política y la capacidad de abrir cuentas de bancos.
A continuación, otros hallazgos importantes del estudio:
* Tanto los países avanzados como aquellos en vías de desarrollo tienen mucho qué ganar. En 46 de las 95 naciones analizadas, un resultado «mejor de la región» podría aumentar el PIB anual de 2025 por más del 10%. Las regiones que tendrían un mejor impulso relativo serían India y Latinoamérica.
* El McKinsey Global Institute llama Gender Parity Score (GPS) a la calificación que mide la distancia que cada país ha viajado par allegar a la paridad, la cual se estableció como un 1.00. El GPS regional es más bajo en Asia del Sur (excluyendo a India), con .44, mientras que el más alto está en Norteamérica y Oceanía, que alcanzaron un .74. Esta herramienta identifica una fuerte conexión entre la equidad de género en una sociedad y las actitudes y creencias sobre el rol de la mujer, así como con la equidad laboral. Esta última es imposible de alcanzar sin los otros dos elementos y no se encontraron países con alta equidad social pero baja equidad laboral.
* El desarrollo económico permite que los países cierren la brecha, pero progreso en cuatro áreas particulares (nivel educativo, inclusión financiera y digital, protección legal y trabajo no remunerado) puede ayudar a acelerar el proceso.
* El 75% del trabajo no remunerado a nivel global lo hacen las mujeres.
* El 30% de las mujeres han sido víctimas de violencia por parte de su pareja,
* Son necesarias seis acciones para acabar con la inequidad: incentivos y apoyos financieros; infraestructura y tecnología; creación de oportunidad económica; construcción de capacidades; promoción y formación de actitudes; y finalmente, leyes, políticas y regulaciones. El sector privado debe tener un papel activo, junto con gobiernos y el tercer sector, y además podrá ver beneficios tanto directos como indirectos por involucrarse.
El documento completo, así como un resumen ejecutivo, pueden descargarse aquí. También se puede consultar la situación país por país en un mapa interactivo, en el cual se muestra que México tiene mayores retos en áreas como violencia contra las mujeres, brecha salarial y trabajo no remunerado, mientras que en áreas como el matrimonio infantil, el liderazgo y la representación política ha hecho un buen trabajo.
