La capa de hielo que flota en el Ártico alcanzó el pasado 24 de marzo la menor extensión que se ha registrado nunca en esa época del año. Esta capa, que se reduce en primavera y verano y se expande en otoño e invierno, ocupó entonces 14,52 millones de metros cuadrados. Es un récord negativo desde que en 1979 se empezó a monitorizar por satélite. El hito coincide con las elevadas temperaturas globales registradas en los meses previos.
La NASA ha preparado una animación que muestra la evolución de la capa de hielo desde entonces hasta este mes de septiembre. En el vídeo, que recoge la etapa en la que se derrite, se puede ver perfectamente cómo se va reduciendo.
Fuente: El País