¿Qué harías si tuvieras más de 7 billones de dólares para gastar? Es posible que tu respuesta incluya viajes, autos o ropa de diseñador y hasta un poco de filantropía, pero casi puedo apostar que no harías lo que el empresario Chuck Feeney, quien en 1982 creó Atlantic Philantrophies con el propósito específico de donar gran parte de su fortuna.
Pero esa no es la parte más inusual de la historia de Feeney. Este billonario que ha aparecido en la lista de los más ricos del mundo según Forbes es dueño de Duty Free Shoppers (compañía que vende artículos libres de impuestos en aeropuertos) y tiene una interesante filosofía, a la que llama «Giving While Living» o «Dando mientras se está vivo».
Es por eso que decidió que la gran mayoría de su dinero se utilizara en proyectos de alto impacto para resolver problemas en áreas como derechos humanos, infancia, adultos mayores y salud. Una vez que el dinero se acabe, lo que sucederá en unos dos años, y que la organización reúna la información necesaria sobre los proyectos en los que participó, se cerrarán sus puertas.
Yo creo que las personas con una riqueza sustancial crean problemas para las generaciones futuras, a menos que acepten la responsabilidad de usar esa riqueza durante su vida para apoyar a causas que lo merezcan, explica Feeney
Dado que se espera que Altantic no exista después de 2020, la organización se dedica a apoyar proyectos urgentes y que pueden solucionarse a corto o mediano plazo. Como explica el sitio web, al dar dinero a causas como el tratamiento para personas con VIH y sida, se previene que estos problemas sociales crezcan y se hagan más difíciles (y más caros) de solucionar. Los países en los que tiene presencia Atlantic Philantrophies son Irlanda del Norte, la República de Irlanda, Estados Unidos, Australia, Bermuda y Vietnam.
La iniciativa de Feeney, que se dio a conocer hasta 1997, cuando la organización ya llevaba operando más de una década, ha sido aplaudida por otros grandes filántropos. Por ejemplo, Warren Buffet lo considera uno de sus héroes y Bill Gates siguió su ejemplo, ya que la Fundación Bill & Melinda Gates tiene el objetivo de donar los 40 billones que posee en un máximo de 20 años después del fallecimiento de sus creadores.
Actualmente, Atlantic Philantrophies se está dando a la tarea de recabar datos sobre los casos de éxito a los que ha apoyado, cerrar sedes en ciertos países y prepararse para los últimos años de su existencia, pero eso no significa que haya dejado de trabajar por completo: en agosto de este año, su CEO Christopher G. Oechsli afirmó que todavía quedan grandes cosas por hacer.
