En un informe de la ONU sobre los efectos de la contaminación por petróleo en la región del delta en Nigeria se insta a la empresa petrolera Shell a revisar por completo los procedimientos que emplea para limpiar los vertidos en la región.
En el informe elaborado por el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA), hecho público hoy en Londres, se afirma que los procedimientos empleados actualmente por Shell para limpiar los vertidos de petróleo en la zona de Ogonilandia del delta del Níger son inadecuados, confirmando lo que Amnistía Internacional ha advertido en repetidas ocasiones.
“Las conclusiones del informe de la ONU dan mayor credibilidad a lo que Amnistía Internacional y otras organizaciones llevan años diciendo sobre la actuación de Shell en el delta del Níger”, ha manifestado Audrey Gaughran, directora del Programa sobre Asuntos Temáticos Globales de Amnistía Internacional.
“Que un equipo de la ONU haya concluido que en algunos casos resulta imposible distinguir los lugares supuestamente ‘limpios’ de vertidos de petróleo de los que están contaminados provoca un profundo estupor, aunque es sintomático de la falta de consideración de Shell hacia el impacto que tiene sobre los seres humanos la contaminación por petróleo. Shell debe aplicar de inmediato las recomendaciones formuladas por la ONU y llevar a cabo una revisión exhaustiva de los procedimientos de limpieza que emplea en el delta”, ha señalado.
Al examinar varios vertidos recientes, el PNUMA descubrió que siempre existía un desfase entre el momento en el que se advertía el vertido y el momento en el que se ocupaban de él. En el peor de los casos, el petróleo que quedaba en el suelo representaba una amenaza inminente a la seguridad y un peligro medioambiental constante.
Muchas zonas del delta del Niger siguen estando contaminadas debido a que las empresas no han limpiado la contaminación ni han recuperado la tierra y el agua.
Shell alega que la mayoría de los vertidos de petróleo que se le achacan se deben a robos, actos de vandalismo y sabotaje de grupos extremistas, lo que se ha puesto ampliamente en entredicho ya que no existen evaluaciones independientes sobre lo que puede haber provocado los vertidos.
Amnistía Internacional y Amigos de la Tierra han presentado una denuncia formal contra Shell por las declaraciones engañosas que ha formulado sobre el asunto del sabotaje.
La población de Ogonilandia lleva décadas expuesta a una grave y generalizada contaminación por petróleo, según el informe de la ONU, que también revela que el gobierno de Nigeria ha fallado gravemente a la hora de regular y controlar a empresas como Shell.
El PNUMA ha observado que los órganos reguladores de Nigeria son débiles y que el organismo nacional encargado de investigar los vertidos de petróleo suele depender totalmente de las empresas petroleras para realizar su labor.
En el informe también se indica que en Ogonilandia existen otras fuentes relativamente nuevas aunque preocupantes de contaminación, como las refinerías ilegales, pero resulta evidente que las prácticas deficientes que Shell lleva décadas aplicando han contribuido de forma decisiva a la contaminación de la zona.
Conforme a la normativa nigeriana, las empresas petroleras deben limpiar todos los vertidos, independientemente de lo que los haya causado. Sin embargo, no se vela por el cumplimiento de esta normativa.
Fuente: Amnesty.org
Publicada: 5 de agosto de 2011.