La Organización de las Naciones Unidas (ONU) está vigilante de los objetivos cero neto y ha puesto en marcha una nueva alianza de expertos, destinada a desarrollar regulaciones ambiciosas y coherentes para los compromisos de empresas, inversores, ciudades y regiones.
Para ello, recientemente —según lo reporta edie—, el Secretario General de la ONU, António Guterres, inauguró el Grupo de Expertos de Alto Nivel sobre los Compromisos de Emisiones Netas Cero de las Entidades No Estatales.
Un equipo protector
Dicho equipo se ha creado para ser un vigilante de objetivos cero neto del sector privado y no vinculante de los organismos institucionales. Su objetivo es mejorar las definiciones actuales de las normas mediante la emisión de criterios de credibilidad y métricas para la descarbonización.
Además introducirá procesos para verificar el progreso y la presentación de informes sobre los compromisos y creará una hoja de ruta para traducir las normas en reglamentos internacionales y nacionales.
A pesar de las crecientes promesas de acción climática, las emisiones mundiales se encuentran en un nivel histórico, siguen aumentando.
António Guterres, Secretario General de la ONU.
Los últimos datos científicos demuestran que la alteración del clima está causando estragos en todas partes, por lo que estamos en una carrera contra el tiempo para limitar el calentamiento global y la estamos perdiendo asegura, Guterres.
Ser un vigilante de objetivos cero neto
Los gobiernos tienen la mayor parte de la responsabilidad de lograr emisiones netas cero para mediados de siglo —especialmente el G20—, pero también se necesita, de manera urgente, que todas las industrias, ciudades y estados cumplan sus promesas.
Para evitar una catástrofe climática, las acciones concretas parecen ser la mejor alternativa. Unas reglas más estrictas y una mayor obligación pueden suponer una reducción real e inmediata.
El grupo cuenta con una representación equilibrada en cuanto a género, diversidad y ubicación geográfica y estará presidido por Catherine McKenna, ex ministra canadiense de Medio Ambiente y Cambio Climático.
La reciente avalancha de promesas de reducción a cero por parte de empresas, inversores, ciudades y regiones será vital para mantener 1.5°C y avanzar hacia un planeta seguro y saludable, pero solo si todos tienen planes transparentes, acciones sólidas a corto plazo y se aplican en su totalidad.
Catherine McKenna, ex ministra canadiense de Medio Ambiente y Cambio Climático.
Algunos de los integrantes de este equipo de especialistas son: Amanda Starbuck, directora de programas del Sunrise Project, con sede en el Reino Unido, Jessica Omukuti, investigadora keniana de inclusión en el net-zero del Oxford Net-Zero Institute for Science Innovation and Society (InSIS) y Bill Hare, cofundador de Climate Analytics.
Navegando por la red cero
La creación de este séquito vanguardista —que formulará recomendaciones antes de finales de año— se anuncia después de que los inversores advirtieran que las corporaciones no están apoyando los compromisos de reducción con medidas creíbles y planes de descarbonización.
Por ejemplo, el Climate Action 100+ —la mayor iniciativa mundial de compromiso de los inversores con el cambio climático, que cuenta con 700 signatarios que cubren 68 billones de dólares en activos gestionados— publicó su índice de referencia de empresas con cero emisiones netas.
En tanto, Benchmark, que analiza a 166 empresas en sus esfuerzos por alinearse con el Acuerdo de París, expresó su preocupación por el hecho de que las corporaciones no están fijando objetivos a medio plazo que estén alineados.
Solo el 42% de las empresas tienen objetivos «integrales» de cero emisiones netas que cubren todas las emisiones materiales, como el Alcance 3, mientras que el 5% tiene planes para alinear las estrategias de capex con los objetivos de emisiones.
Asimismo, el reporte de Benchmark reveló que el 17% cuenta con «sólidas estrategias de descarbonización cuantificadas», y muchas de ellas únicamente cuentan con compromisos.
Por su parte, el año pasado, la iniciativa Science Based Targets (SBTi) dio a conocer la primera norma mundial de emisiones netas corporativas acordes con la ciencia del clima.
La norma Net-Zero de la SBTi es la primera basada en la ciencia de los objetivos de emisiones netas. La certificación se otorga a las corporaciones si sus estrategias de descarbonización están en consonancia con el objetivo de mantener el calentamiento del planeta en 1.5ºC.
Pese a que la demanda por claridad en las cuentas ambientales sigue aumentando y que cada vez existen herramientas más puntuales de medición, las cifras de contaminación son preocupantes, por ello, el llamado es claro: el planeta necesita un verdadero vigilante de objetivos cero neto.