En un mundo cada vez más consciente de los desafíos ambientales y la necesidad de preservar nuestros recursos naturales, adoptar prácticas de reciclaje y economía circular se vuelve fundamental para las empresas, ya que son enfoques clave para minimizar el impacto negativo en el medio ambiente y promover la sostenibilidad a largo plazo. Es por ello que la inauguración de la primera planta de aceite pirolítico en México, enfocada en el reciclaje de empaques plásticos flexibles, marcará un hito en la industria.
Con el inicio de sus operaciones y el esfuerzo de acopio de estos residuos se evitará que toneladas de plásticos flexibles terminen en el ambiente o en vertederos, disminuyendo el impacto que estos pudieran tener en relación con la contaminación del suelo, el agua y el aire. El reto de esta iniciativa será poder colaborar con diferentes petroquímicas para utilizar el aceite pirolítico y convertirlo en resina reciclada grado alimenticio que pueda utilizarse en nuevos empaques, para reintegrarse en la cadena de suministro, cerrando así el ciclo de vida de los productos.
Esta iniciativa contribuye a la adopción de prácticas de economía circular, en las que se replanteen los modelos de negocio, la importancia en el diseño de productos y la correcta gestión de los residuos. Es así como Greenback Recycling Technologies, se suma en la visión de Nestlé para lograr un futuro libre de residuos a través de la ejecución de soluciones innovadoras que hagan frente al reto de la contaminación de plásticos flexibles en México y que, por primera vez, pone en funcionamiento, a gran escala, su método de reciclaje con el apoyo de Nestlé México. ¿Quieres saber cómo? ¡Sigue leyendo!
Inauguración de la planta de aceite pirolítico
Una de las empresas que siempre ha destacado por su preocupación por las personas y el planeta es Nestlé —líder mundial en nutrición, salud y bienestar—, por lo que no solo ha planteado soluciones de seguridad alimentaria e iniciativas de desarrollo social, sino que se ha comprometido a reducir su impacto ambiental y promover prácticas de economía circular.
Esto llevó a la empresa a trabajar de la mano de Greenback —compañía suiza dedicada al reciclaje—, para inaugurar la primera planta de aceite pirolítico en el municipio de Cuautla, Morelos, la cual estará enfocada en reciclar empaques plásticos flexibles.
«Esta gran inversión de Nestlé México y Greenback representa la mejor solución para el cuidado de la salud de los consumidores y para el cuidado integral de nuestro medio ambiente».
Rodrigo Luis Arredondo López, Presidente Municipal de Cuautla, Morelos.
Considerando que este proyecto generará un gran impacto positivo en el ambiente, ya que reducirá la contaminación plástica, se ha convertido en un gran orgullo para las empresas involucradas y el gobierno local. Por lo que, al evento de inauguración, asistieron grandes personalidades como:
- Fausto Costa, Presidente Ejecutivo de Nestlé México.
- Marco Guimarães, Vicepresidente de Técnica y Manufactura de Nestlé México.
- Philippe von Stauffenberg, CEO y fundador de Greenback.
- Martin Reich Sapire, Director de Greenback México.
- Milly Betancourt de la Garza, Gerente de Sitio de Greenback Cuautla.
- Gobernador del estado de Morelos, Cuauhtémoc Blanco Bravo.
- Marina Robles, Secretaria del Medio Ambiente de la CDMX.
- Rodrigo Luis Arredondo López, Presidente Municipal de Cuautla, Morelos.
- José Luis Galindo Cortez, Secretario de Desarrollo Sustentable del estado de Morelos
- Ana Cecilia Rodríguez González, Secretaria de Desarrollo Económico y de Trabajo.
Este proyecto se enfoca en empaques plásticos flexibles que actualmente se consideran como difíciles de reciclar, incluyendo plásticos flexibles multicapa y plásticos laminados con aluminio, con el objetivo de lograr la circularidad de los plásticos con grado alimenticio. Por lo tanto, esta colaboración entre Nestlé México y Greenback representa una importante solución para la reducción de residuos plásticos y el cuidado de la salud de los consumidores.
«Con este proyecto se está marcando la pauta en el país al presentar una solución avanzada de recolección y reciclaje, escalable y distribuida, que ofrece a los propietarios de las marcas y la cadena de valor de los plásticos un reciclaje totalmente trazable».
Ana Cecilia Rodríguez González, Secretaria de Desarrollo Económico y de Trabajo.
El proceso
La primera planta de aceite pirolítico enfocada en el reciclaje de empaques plásticos flexibles desempeña un papel crucial en el manejo de residuos en los municipios de Morelos y del Estado de México, así como de las alcaldías de la Ciudad de México, reconociendo el valor que tienen los desechos cuando hay un buen manejo de estos. Es por ello que la planta se dedicará a aprovechar y valorizar diferentes tipos de plásticos que no tenían una forma efectiva de reciclaje en el país.
Para procesar estos residuos plásticos en la planta de Greenback se llevan a cabo diferentes etapas:
- Recepción de los empaques de plástico suministrados por su proveedor, «La Perseverancia» a través de una planta de separación de residuos.
- Análisis con una cámara de reconocimiento artificial para identificar cada tipo de plástico.
- Control de calidad para desechar aquellos materiales que no son aptos para el proceso de pirólisis, como los orgánicos o residuos textiles.
- Trituración del material para su posterior manejo.
- Secado para eliminar cualquier humedad que puedan contener.
- Introducción de los plásticos en el módulo de pirólisis para ser tratados con una tecnología de microondas de la planta.
- Se calienta un reactor a 600 °C y se introduce el plástico, para transformar la materia en gas al romper las moléculas del plástico en hidrocarburos.
- El gas resultante se somete a un sistema de condensación, permitiendo obtener el aceite pirolítico, el cual será procesado por refinerías.
- Las refinerías tendrán la oportunidad de generar resina reciclada grado alimenticio, que puede ser utilizada en la elaboración de nuevos empaques.
De esta manera, la planta logrará cerrar el ciclo de disposición de los residuos postconsumo, promoviendo la circularidad. Además, cabe destacar que, anualmente, se procesarán más de 2 mil toneladas de plásticos flexibles postconsumo, lo que demuestra la eficiencia y la capacidad de manejo de la planta en la valorización de los materiales que recibe.
«Nestlé es una empresa comprometida con la sostenibilidad, tenemos metas y objetivos muy claros. Hemos invertido muchísimo en las distintas áreas que necesitamos para generar una economía mucho más sustentable. En Nestlé tenemos la visión de lograr un futuro libre de residuos y con esta iniciativa demostramos que seguimos avanzando para lograrlo».
Fausto Costa, Presidente Ejecutivo de Nestlé México.
Y, como afirma Martin Reich Sapire, director de Greenback México: «Creamos circularidad en los plásticos flexibles que se desechan, evitando que estos terminen en el medio ambiente. Logramos esto a través de una innovadora tecnología que se llama Enval, que transforma los plásticos flexibles en materia prima para fabricar nuevos empaques. Añadimos valor con nuestra exclusiva plataforma de circularidad, EcoVeritas, es lo que nos permite certificar que lo que estamos haciendo realmente proviene de postconsumo». Así, Greenback y Nestlé México están desempeñando un papel crucial en el impulso de la economía circular a través de su planta de aceite pirolítico enfocada en el reciclaje de empaques plásticos flexibles. Mediante esta iniciativa, están abordando el desafío de los residuos plásticos postconsumo difíciles de reciclar en México.
Serìa excelenete que se conviertan en receptores de plàstico, proveniente de otros paìses, para reducir significativamente el impacto del plàstico en la naturaleza.