De acuerdo con ONU Mujeres, en 49 países no existen leyes que protejan específicamente a las mujeres contra la violencia física y/o sexual. Esta situación de violencia se perpetua por el contexto social y cultural de dominación.
Las situaciones que se viven día a día dan cuenta de los prejuicios, sesgos, discriminación y desigualdad que ellas viven. Por lo que a continuación te compartimos 15 escenas de la realidad de las mujeres y micromachismos, así como diversos conceptos para comprender de qué va la equidad de género y la lucha en el marco de este 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer.
1. Matriarcado
El matriarcado se entiende como una forma de organización social en donde un grupo de mujeres tiene en sus manos el poder político, económico o religioso. Esto difiere de la cantidad de mujeres, es decir, pueden existir muchas mujeres en una empresa o en una casa; sin embargo, si el poder lo continúa ostentando un hombre, no se trata de matriarcado.
De hecho, en la actualidad muchas mujeres son jefas de hogar, algunas de ellas son las únicas que lo sustentan. Eso no lo convierte en matriarcado porque la estructura social no le otorga el poder a las mujeres, sino a los hombres.
Incluso muchos de estos hogares son constituidos por mujeres, ya que los padres dejaron de ejercer su rol tanto en la crianza de hijos e hijas como en su manutención. Los padres están ausentes, y lejos de que sean hogares con poder para las mujeres, solo son núcleos en donde el desapego paterno es claro.
Cabe destacar que no porque en un hogar se integre mayoritariamente por mujeres significa que su estructura sea matriarcal, esto dependerá de las condiciones de poder que tengan ellas y no por su cantidad.
2. Invisibilización
Una realidad de las mujeres es enfrentar diversos cuestionamientos, entre ellos… ¿Por qué no existe Día del Hombre? Lo más relevante de este tipo de comentarios es que el Día Internacional de la Mujer no es una celebración, sino que es un espacio para luchar por los derechos de ellas: este sector social no siempre ha contado con ellos, y en la actualidad aún lucha para obtenerlos.
Por ejemplo, el derecho a que las mujeres en México pudieran votar no fue posible sino hasta el 17 de octubre de 1953, una lucha que inicio cuando Yucatán reconoció el voto tanto municipal como estatal en 1923, con tres mujeres electas para diputadas al congreso estatal: Elvia Carrillo Puerto, Raquel Dzib y Beatriz Peniche de Ponce. Recientemente, se lucha por los derechos sexuales y reproductivos.
Y para las y los que dudan… sí existe el Día Internacional del Hombre, es un evento anual que se celebra cada 19 de noviembre y tiene como objetivo «fomentar la salud de los hombres y del niño, la mejora de las relaciones de género, la promoción de una mayor igualdad de género, y la puesta en relieve de modelos masculinos positivos».
3. Falso aliado
Algunos discursos feministas se separan claramente de los hombres y apelan a que las mujeres son las únicas facultadas para luchar por sus derechos. En especial porque se han observado conductas en donde hay «apoyo», pero en situaciones estructurales se repiten los patrones.
Tal como se observa en la imagen: «apoyan» a las mujeres, sin embargo, no condenan los actos de otros hombres. Incluso algunos hombres se declaran «feministas» como una forma de interacción con mujeres.
4. Derechos Laborales
Dentro de las luchas que realizan las mujeres se encuentran los derechos laborales, de hecho, una forma de medir esta distancia es a través de la brecha de género, la cual es una medida que muestra la distancia entre mujeres y hombres respecto a un mismo indicador, en este caso el trabajo.
Tomando esto en cuenta, muchas empresas pueden establecer «discursos» en pro de la igualdad de género, sin embargo, estos no se materializan. Por ejemplo, no establecen salarios iguales o prefieren a hombres en puestos de liderazgo.
5. Corresponsabilidad
Una realidad de las mujeres no solo en comentarios, sino en acciones es la «ayuda invaluable» que reciben de sus parejas o convivientes masculinos. Esta falsa creencia supone que las tareas de cuidado recaen en las mujeres sin tomar en cuenta que cada persona es responsable de sí misma.
Bajo esa idea, un concepto que ayuda a entender mejor las tareas compartidas es la corresponsabilidad.
Corresponsabilidad es compartir las tareas de cuidados entre varones y mujeres. Siendo corresponsables para cuidar, deconstruimos los roles tradicionales de género.
De esta forma, los varones y mujeres participan en la misma medida en el trabajo no remunerado y tienen las mismas oportunidades para desarrollar su vida personal, familiar y laboral.
6. RSE washing
La Responsabilidad Social Empresarial (RSE) es una visión de negocios que integra el respeto por las personas, los valores éticos, la comunidad y el medioambiente con la gestión misma de la empresa, independientemente de los productos o servicios que ésta ofrece, del sector al que pertenece, de su tamaño o nacionalidad.
La RSE se preocupa por los impactos de sus operaciones en las personas y en las comunidades. Por supuesto que dentro de la RSE se encuentra la preocupación por la igualdad de género.
Sin embargo, se convierte en RSE washing cuando se apela, publicita, e incluso vende algo que no existe dentro de la empresa. Esto se traduce, en que si bien es necesario reconocer el Día Internacional de la Mujer, no sirve de nada que se haga como un complemento, o «relleno». Por el contrario, adquiere valor cuando es un ejercicio constante y consecuente y no solo situaciones de una ocasión.
7. Día Internacional de la Mujer
El Día Internacional de las Mujeres fue convocado por las Naciones Unidas desde 1975 y proclamado por la Asamblea en 1977. Encuentra sus orígenes en las manifestaciones de las mujeres que, especialmente en Europa, reclamaban a comienzos del siglo XX :
- Derecho al voto.
- Mejores condiciones de trabajo.
- La igualdad entre los sexos.
Este 2022, el 8 de marzo se conmemora bajo el lema «Igualdad de género hoy para un mañana sostenible» y reclama una acción por el clima por y para las mujeres.
Dado que las mujeres y las niñas soportan la carga de los efectos de esta crisis, también es esencial que lideren y dirijan el cambio en pos de soluciones, de la mitigación y la adaptación climática.
ONU Mujeres.
8. Privilegio masculino
Según lo señala la Real Academia de la Lengua Española, un privilegio es “una ventaja exclusiva o especial que goza alguien por concesión de un superior o por determinada circunstancia propia”, con esta definición se pueden indagar que el llamado privilegio masculino, es aquel que gozan los hombres por el hecho de nacer con dicho sexo.
Y es que en un sistema machista y patriarcal, como en el que vivimos, estas concesiones se vuelven tratados tácitos y leyes no escritas a las que se sujetan todas las dinámicas sociales.
Este concepto implica desigualdad y coloca a mujeres y hombres en posiciones diferentes, que son fomentadas por las estructuras sociales que valoran más al sexo masculino, ya sea en la forma en la que se expresan o toman decisiones y les adjudican habilidades que impactan en el ámbito privado y hasta en el profesional.
9. Machismo
Este término alude al conjunto de “actitudes, normas, comportamientos y prácticas culturales” que enfatizan y validan el dominio masculino en todo el sistema social. El machismo es el génesis de la cultura patriarcal, causante de la discriminación y violencia hacia quienes no son parte de la hegemonía.
La supremacía masculina se manifiesta de diversas maneras como puede ser la violencia física, psicológica y emocional, así como estereotipos dañinos sobre lo que implica ser hombre. De ahí nacen lo que se denomina como masculinidades tóxicas, las cuales son la principal fuente de violencia y agresión.
Erradicar el machismo y sus expresiones es un tarea imperante para la conformación de una sociedad más justa y equitativa, asimismo entender cómo funciona es un paso fundamental para la mitigar las grandes problemáticas en torno a la disparidad de género que afectan en todos los niveles.
10. Estrategias de marketing
Al llegar el Día Internacional de la Mujer, muchas marcas y empresas deciden mostrar a su audiencia lo comprometidas que están en la lucha por la igualdad. Sin embargo, al no tener una conciencia real sobre qué implica la conmemoración suelen aparecer prácticas que revictimizan o discriminan al género femenino.
Un error común de las marcas es ver este día como una fecha de celebración, cuando el verdadero norte de esta conmemoración engloba un día de reflexión.
El Día Internacional de la Mujer debe servir para que las empresas refuercen su compromiso igualitario, por lo que se deben evitar las campañas que ofrezcan premios o detalles para consentirlas.
Para evitar un efecto contrario, es necesario que quienes dirijan las estrategias de marketing opten por informarse y de ser necesario busquen asesoría, para que comprendan la problemática más allá de la retribución.
11. Estereotipo de género
De acuerdo con el Glosario para la igualdad del Instituto Nacional de las Mujeres, los estereotipos son ideas, cualidades y expectativas que se le atribuyen a mujeres y hombres. Constituyendo representaciones simbólicas de lo ellas y ellos deberían ser y sentir. Representan ideas excluyentes entre sí que al asignarse reafirman un modelo de feminidad y otro de masculinidad.
Son las creencias y atribuciones preconcebidas sobre cómo deben ser y cómo deben comportarse las personas, de manera que, a cada género, se le reconoce un determinado comportamiento, una forma de ser, una apariencia o vestimenta definida.
Secretaría de las Mujeres del Estado de Zacatecas.
Para mitigarlos es necesario apoyarse en la educación, y para ello se requiere que todas y todos trabajemos en ello. Ya que los estereotipos suelen emplearse para justificar la discriminación de género y se refuerzan, además son los responsables de la dicotomía entre hombres y mujeres que excluye a estas últimas de los espacios públicos, poniéndolas como las responsables de la crianza y los cuidados, anulando su derecho de desarrollarse profesionalmente.
12. Sororidad
La sororidad es un término derivado del latín soror que significa hermana. Sororidad es un término utilizado para referirse a la hermandad entre mujeres con respecto a las cuestiones sociales de género.
De acuerdo con Marcela Lagarde, política, académica, antropóloga e investigadora mexicana, esta comprende la amistad entre quienes han sido creadas en el mundo patriarcal como enemigas, y entendiendo como mundo patriarcal el dominio de lo masculino, de los hombres y de las instituciones que reproducen dicho orden.
La sororidad se encuentra la posibilidad de eliminar la idea de enemistad histórica entre mujeres, y es una forma contemporánea de ver el feminismo que ha sufrido bastantes críticas debido a su inflexibilidad e intolerancia que irónicamente se encuentran presentes también en el machismo.
Por lo que comentarios hirientes desde las mujeres hacia otras mujeres es una muestra clara de falta de sororidad.
13. Mansplaining
Los hombres me explican cosas (2014) el texto escrito por Rebecca Solnit en el que narra sus experiencias como escritora en espacios públicos, donde hombres intentaban “alecccionarla”, “orientarla” y “educarla” sobre temas que ella dominaba.
El mansplaning es el acto de explicar sin tener en cuenta el hecho de que la persona que está recibiendo la explicación sabe igual o más sobre el tema que la persona que lo está explicando y se hace desde el privilegio, con frecuencia suponiendo que las mujeres saben menos o se les da menos valor a su conocimiento.
14. Acoso sexual
De acuerdo con Legal Aid At Work, el acoso sexual consiste de cualquier atención sexual desagradable que usted puede recibir en el trabajo. Es un tipo de discriminación basada en sexo, y es ilegal.
Acoso sexual puede ser expresado de varias maneras tal como comentarios sobre su cuerpo o actividad sexual, chistes sexuales, pedidos de favores sexuales, presión para citas, manosear, agarrar, miradas no favorables, carteles que degraden a las mujeres, asalto sexual o violación.
Un acosador puede ser un empleador, supervisor, compañero de trabajo, o cliente, y puede ser del sexo opuesto o del mismo sexo. No se debe naturalizar el acoso sexual y ser visto como un «piropo o halago», ya que se trata de conceptos totalmente distintos.
15. Misoginia
De acuerdo con el Instituto Nacional de las Mujeres, la misoginia “proviene de dos voces griegas miso y gyne que significan detestar a la mujer. Se usa para referirse a creencias o expresiones emocionales, psicológicas e ideológicas de odio hacia las mujeres y a lo femenino”.
Es importante destacar que la misoginia se encuentra profundamente arraigada en las culturas y considera a las mujeres inferiores a los hombres. Además, se les atribuye a las mujeres un rol centrado en:
- La reproducción de la especie humana.
- En el cuidado de hijos o hijas.
- Cuidado del hogar.
E incluso se les “esencializa” en frágiles, débiles, por ello, se establecen prácticas de subordinación, sometimiento, violencia e incluso crímenes contra las mujeres.
Si mostramos emoción nos dicen dramáticas. Si queremos jugar contra los hombres, somos dementes. Y si soñamos con igualdad de oportunidades estamos delirando. Si defendemos algo, somos unas desquiciadas. Si somos demasiado buenas, algo anda mal con nosotras. Y cuando nos enfadamos, somos histéricas, irracionales o simplemente estamos locas.
Serena Williams.
Las situaciones expuestas son consideradas como micromachismos,un término propuesto por el psicólogo Luis Bonino Méndez que constituye la base y caldo de cultivo de las demás formas de la violencia de género o misoginia: maltrato psicológico, simbólico, emocional, físico, sexual y económico, que serían normalizados.
Es momento de generar conciencia sobre lo que realmente busca el Día Internacional de la mujer, y dejar atrás todo lo que las violenta a ellas durante el resto del año.
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