Una de las preguntas que más nos gusta hacerles a los directivos o coordinadores de la RSE es ¿La responsabilidad social es riesgosa? Las respuestas suelen ser de lo más diversas… Nosotros consideramos que definitivamente sí lo es.
Para muestra de lo anterior basta con echarle un ojo a los Public Eye Awards, que «distinguen» a aquellas organizaciones que anteponen sus intereses económicos a la protección ambiental y los derechos humanos; es un premio público a las “peores” empresas del año. Dentro del mismo encuadre, la ONG Amigos de la Tierra ha hecho entrega en Francia de los «antipremios» Pinocchio, una iniciativa a través de la que se denuncia a empresas que se declaran respetuosas de aspectos ambientales y sociales, pero en la práctica tienen políticas poco responsables.
Una encuesta en la que han participado 6.000 internautas se ha tomado como base para elegir a los «galardonados» que este año fueron Somdiaa, empresa del grupo agroalimentario Vilgrain, y Eramet, por un proyecto para el desarrollo de una mina de níquel en Weda Bay, Indonesia, en un ecosistema vulnerable protegido hasta 2004, que dejó de tener protección debido a la presión empresarial. Finalmente, el banco Crédit Agricole ha sido «premiado» por el uso abusivo de una imagen ecológica en su publicidad… en otras palabras, Green Wash.
De modo que resumiendo, es más riesgoso declararse responsable y no serlo, que simplemente abstenerse de entrar en este asunto de la responsabilidad social. ¿De qué lado estaría hoy su empresa?