En anteriores oportunidades hemos venido haciendo referencia a la necesidad de adoptar un nuevo enfoque en la manera de hacer negocios, de profundizar un mayor compromiso de la alta dirección en la gestión de la Responsabilidad Social Empresarial (RSE), asumiéndola como una cuestión cultural, un modo de actuar y de entender la dimensión integral de la empresa y de su entorno económico, social y medioambiental, lo que necesariamente implica pensar en el futuro, estando atentos a los cambios y consolidando nuestras relaciones con los stakeholders.
Este proceso de gerencia del cambio debe sustentarse en principios éticos y morales de valoración universal como la integridad, la honestidad, la transparencia, la comunicación, el diálogo y el fomento del desarrollo innovador y creativo del talento humano en las organizaciones, aspectos que enfatizan la dignidad y los derechos intrínsecos de cada persona, al tiempo que contribuyen al fomento de una mayor inclusión social.
Para ello, se requiere propiciar el acercamiento e integración entre las empresas y la academia, creando sinergias para el desarrollo de programas de formación de nuevos líderes socialmente responsables, dotados de talento y especiales capacidades de gestión, éticamente preparados tanto para asegurar el cumplimiento de los objetivos económicos y financieros de las empresas, como para asumir el nuevo enfoque en los negocios inclusivos, que les permita mantener operaciones productivas rentables, sostenibles, de alto impacto social, sujetas a los principios de transparencia y rendición de cuentas a todos sus stakeholders.
Las escuelas de administración y de negocios están llamadas a ser actores relevantes de este proceso, ayudando a formar las competencias, actitudes y la conducta del nuevo liderazgo empresarial como estrategia para alcanzar la integración de las distintas visiones de todos los actores sociales comprometidos por alcanzar un desarrollo sostenible y una mejor sociedad.
La conformación de las nuevas redes académico-empresariales, entre las que destacan la Red Iberoamericana de Universidades por la Responsabilidad Social Empresarial (RedUNIRSE) y la red Social Enterprise Knowledge Network (SEKN), están orientando sus esfuerzos hacia la formación de profesionales que promuevan la sensibilidad y la reflexión sobre la RSE en todas sus áreas de influencia, coadyuvando al desarrollo de organizaciones mucho más inclusivas y socialmente responsables.
Esta nueva dimensión académico-empresarial de la RSE ha encontrado un excelente soporte en la adopción, por parte de las principales escuelas de negocios a nivel internacional, de los Principios para la Educación Responsable en Gestión (Principles for Responsible Management Educaction, PRME), una iniciativa del Pacto Global de las Naciones Unidas orientada hacia la construcción de una comunidad global de aprendizaje, que aborda de manera sistemática la innovación de la enseñanza de negocios bajo una visión ética y socialmente responsable de la empresa, de la gerencia y de su entorno.