Aunque las matemáticas son una ciencia fundamental en la vida, para muchos de nosotros e incluso, para nuestros hijos, esta materia puede resultar ser una de las más difíciles de aprender en la escuela, pero ¿a qué se debe?
De acuerdo con la prueba PISA, el 55 por ciento de los niños mexicanos no cuenta con las habilidades matemáticas básicas como sumar, restar, multiplicar o dividir, cuando se trata de aplicarlas a problemas de razonamiento. Actualmente, México se ubica en el lugar 53 de los 65 países miembros de la OCDE según los resultados de dicha prueba.
Gran parte del problema por el cual las matemáticas se vuelven una de nuestras debilidades, no solo como individuos, sino como sociedad, es la forma en la que se enseñan.
En muchas ocasiones, esta materia se imparte como algo mecánico y de memorización, cuando en realidad debería de provocar el análisis, la reflexión y la creatividad en la resolución de problemas, para que en lugar de ser una clase tediosa se vuelva un reto divertido e interesante para aquel que lo está aprendiendo.
Las empresas, como parte de su responsabilidad social, cada vez comienzan a involucrarse más en temas de educación y escolaridad, buscando mejorar ciertos aspectos que van desde lo físico, con el mejoramiento de instalaciones, hasta el bienestar de los alumnos y sus familias para un mejor desarrollo, ¿pero qué tendrían que ver la RSE y las matemáticas?
La RSE y las matemáticas
Actualmente México, además de contar con una planta de investigación científica básica pequeña, el número de investigadores matemáticos activos es muy bajo.
El desarrollo de grandes tecnologías que permitan mejorar la calidad de vida de las personas o contribuir a la resolución de problemas de carácter social o ambiental, se da debido al previo interés en las ciencias básicas.
Apostar por una renovación que lleve al mejoramiento del método de enseñanza en ciencias y matemáticas significa apostar por un futuro rico en investigación y con tecnologías superiores. Por lo tanto, un programa de RSE y matemáticas tiene miras a largo plazo y promueve el desarrollo social.
A continuación te compartimos el caso de una empresa con un programa de responsabilidad social encausado a ofrecer un nuevo enfoque en temas matemáticos en el área escolar.
Fundación José Cuervo y las matemáticas
El rezago matemático es generalizado en todos los estados, en todos los niveles educativos y en todos los tipos de instituciones educativas, públicas o privadas.
De acuerdo con Fundación José Cuervo, los alumnos de Tequila, Jalisco, la principal comunidad donde la empresa tiene operaciones, están aplicando pruebas año tras año, arrojando indicadores de que algo debe de cambiar, que no es posible seguir enseñando matemáticas de la misma forma en que se hacía años atrás.
En enero de 2017 Fundación José Cuervo realizó una alianza con la Secretaría de Educación Pública, instituciones privadas y padres de familia para cambiar la realidad que viven alumnos de nivel secundaria de la comunidad de Tequila en Jalisco, a partir de las matemáticas.
La empresa José Cuervo, a través de su fundación busca aumentar la competitividad en los alumnos para tener una mayor proyección, pues sabe que las matemáticas se han convertido en un indicador del desempeño académico y un referente a nivel internacional.
La nueva propuesta
Fundación, en conjunto con sus aliados abrieron un canal de diálogo y brindaron apoyo a los docentes de matemáticas e instituciones de educación secundaria para dotarlos de herramientas que fortalezcan la labor que realizan frente a sus grupos por medio de distintas técnicas:
- Un congreso de matemáticas exclusivo para maestros de nivel secundaria que logró llegar a un total de 200 docentes.
- Dos campañas de sensibilización sobre matemáticas para toda la comunidad, que involucra a las 6 secundarias de la región, logrando llegar a dos mil jóvenes en cada campaña.
- Capacitación a 95 maestros de matemáticas en temas como:
- Estrategias para la solución de deficiencia en los conocimientos adquiridos en niveles previos.
- Motivación del alumno dentro y fuera del aula.
- Generación de habitos constructivos.
- Metas a corto, mediano y largo plazo.
- Dinámicas que generen interés.
- Regulación del comportamiento de alumnos.
- En los alumnos se interviene por medio de conferencias, el rally «Pitágoras», así como talleres y cursos intensivos para los alumnos ganadores de matemáticas a nivel secundaria.
Fundación José Cuervo señala que aunque existe el paradigma de que las matemáticas son difíciles, no es imposible arrancarlo de raíz.
«Debemos reconocer que para alcanzar este objetivo tenemos que colaborar todos los involucrados en el proceso educativo: institución educativa, docentes, alumnos, padres de familia y organizaciones que potencian el cambio. Si un punto en la cadena flaquea en su participación, es probable que los cambios no se ven reflejados según lo esperado. Sin embargo, sabemos que es posible lograr un cambio radical en nuestra sociedad.»
Este programa de RSE y matemáticas busca impactar en la percepción de los estudiantes, formar jóvenes capacitados para solucionar problemas, con una actitud positiva hacia las dificultades y que sepan que cualquier obstáculo lo pueden superar.
«Esta solución no es exclusiva para matemáticas, será la misma que tomarán en distintas etapas de su vida.»
A través de esta iniciativa, que se pretende continuar en la comunidad hacia el 2018, José Cuervo participa de forma activa en un cambio social profundo intelectual y actitudinal, ofreciendo a los jóvenes herramientas más eficientes para la construcción de un futuro prometedor.