Los comisionados del Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI) y especialistas lanzaron la campaña “Pensar antes de sextear, 10 razones para no practicar el sexting”.
La comisionada presidenta, Ximena Puente de la Mora, advirtió que el fenómeno del “sexting” alcanza, en cifras conservadoras, a cuatro millones de menores de edad y explicó que según una encuesta levantada por la Alianza para la Seguridad en Internet, 11 millones y medio de niños y jóvenes de entre seis y 19 años, hacen uso constante de las tecnologías de la información.
Por otro lado, el 36.7 por ciento de los 10 mil estudiantes encuestados, con edades entre los 12 y 16 años de edad, conoce a alguien que ha enviado o reenviado imágenes suyas desnudo o semidesnudo, de lo cual se puede inferir que cuatro millones han practicado el llamado “sexting”.
Sin embargo, la comisionada presidente del INAI aclaró que esta práctica, llamada “sexting” por la combinación entre sex (sexo, en inglés) y texting (envío de mensajes de texto por teléfono), es peligrosa.
Se trata de una práctica que puede empezar por diversión, pero puede degenerar en daños al honor, la propia imagen, extorsión, chantaje, ciberbullying e incluso pornografía infantil.
Desafortunadamente, México es el primer lugar en “sexting” en toda América Latina, de ahí la pertenencia de esta campaña, a la que se suman el Canal del Congreso, el InfoDF, el INAI y próximamente la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) y la oficina en México de UNICEF.
En el mismo evento, el comisionado del INAI, Francisco Javier Acuña Llamas, indicó que se trata de un fenómeno que no se puede erradicar, porque proviene de un acto de libertad, en el que cada quien decide exponer sus fotos desnudo, en principio, con un conocido, con una intención determinada.
Pero al igual que las enfermedades de transmisión sexual que no pueden proscribirse, pero tienen conductas de riesgo, el “sexting” es una conducta de riesgo que sólo deja la oportunidad de controlar sus efectos a través de la prevención.
Fuente: Aristegui