De acuerdo con INC, las causas de burnout han sido estudiadas durante esta pandemia, más que nunca, pues en la actualidad no es sorprendente escuchar de personas entrevistadas que se sienten muy cansadas con el trabajo.
En una encuesta reciente realizada por la empresa de tecnología de recursos humanos Workhuman, el 41% de los encuestados afirmó estar agotado en los últimos meses. Otra encuesta realizada por The Hartford encontró una tasa general de agotamiento del 61%.
Pero aunque un gran número de trabajadores se sienta agotado después de casi dos años de pandemia puede ser evidente, las razones exactas por las que tantos sufren son mucho menos conocidas, según Jennifer Moss, autora de un nuevo libro titulado The Burnout Epidemic (2021).
Causas de burnout
Los empresarios suelen pensar que la lucha contra el burnout se limita a ofrecer más vacaciones o beneficios más generosos, pero Moss insiste:
Las causas de burnout son una compleja constelación de malas prácticas y políticas en el lugar de trabajo, legados institucionales anticuados, roles y personalidades de mayor riesgo, y problemas sociales del sistema que han permanecido inalterados y nos han afectado durante demasiado tiempo.
Jennifer Moss, autora del libro titulado The Burnout Epidemic (2021).
En resumen, el agotamiento es complicado. Y si se quiere abordar eficazmente el problema, hay que analizar detenidamente los causas subyacentes que lo provocan. Un reciente artículo del Greater Good Science Center que cubre el libro de Moss expone de forma útil seis de los más importantes.
1. Excesiva carga de trabajo
El exceso de trabajo contribuye enormemente al agotamiento, y los datos de la OMS muestran que los horarios excesivos provocan más de medio millón de muertes al año.
Según Moss, la solución del problema está principalmente en manos de los empleadores, que sugieren que las empresas «identifiquen objetivos de baja prioridad para sus empleados» para que puedan gestionar mejor sus cargas de trabajo, «proporcionen más apoyo cuando las necesidades cambien repentinamente» y consideren la posibilidad de implantar una semana laboral de cuatro días, entre otras medidas.
2. Percepción de falta de control
«Los estudios demuestran que la autonomía en el trabajo es importante para el bienestar, y ser microgestionado es particularmente desmotivador para los empleados. Sin embargo, muchos empresarios recurren a vigilar cada movimiento de sus empleados, a controlar su horario de trabajo o a castigarlos por cometer errores», señala Greater Good.
Ofrecer a los empleados más opciones sobre dónde, cuándo y cómo trabajar puede ser una forma increíblemente eficaz de combatir el burnout si se sospecha que la falta de autonomía es un factor contribuyente.
3. Falta de reconocimiento
No se trata solo de pagar a los empleados lo que valen, aunque eso es esencial si quiere evitar que su personal tenga burnout, sino también de asegurarse de que los empleados saben que sus contribuciones son vistas y valoradas.
En lugar de fomentar la envidia y la competencia malsana repartiendo recompensas sólo a los mejores contribuyentes, Moss sugiere «la gratitud de los altos cargos y la gratitud entre iguales».
4. Relaciones deficientes
Conocer y querer a tus compañeros como personas completas y reales es un fuerte predictor de la felicidad en el trabajo, mientras que la falta de conexión social en el trabajo es un predictor del agotamiento.
Por eso Moss recomienda a los empleadores «dar a la gente espacios donde puedan conectar con sus colegas en torno a temas no relacionados con el trabajo», así como «fomentar el voluntariado y construir culturas más inclusivas».
5. Falta de equidad
Una vez más, no es de extrañar que el hecho de sentirse injustamente tratado moleste a la gente y merme su motivación para el trabajo.
Los jefes nunca podrán eliminar todos los desaires y agravios percibidos, pero sí pueden proporcionar mecanismos para informar y resolver estos problemas. Por supuesto, también es esencial ser implacable a la hora de eliminar los prejuicios y la discriminación.
6. Desajuste de valores
Como ha señalado el profesor de Harvard Arthur Brooks, el mejor trabajo para cada persona es el que coincide con sus valores. Lo contrario también es cierto. Los trabajos más propensos a provocar el agotamiento son aquellos en los que nos sentimos en conflicto con nuestros compromisos más profundos.
Dependiendo de las particularidades de la situación, solucionar este problema puede implicar la contratación de personas cuyos valores se alineen mejor con la misión de la empresa o que la empresa defienda realmente los valores en los que dice creer.
Cada caso de burnout es único, con su propia colección de causas tanto personales como profesionales. Pero la lista de Moss de factores comunes que contribuyen a ello es un punto de partida para que tanto jefes como empleados reflexionen sobre las verdaderas raíces de los sentimientos de agotamiento, de modo que puedan luchar contra la actual epidemia de agotamiento.