Las emisiones de gases de efecto invernadero se incrementaron entre un 4% y un 5% en España durante 2015 respecto al año anterior, según las conclusiones del informe sobre ‘Cambio Climático en España: evidencias, emisiones y políticas’, realizado por el Observatorio de la Sostenibilidad de España y presentado este jueves en el Gabinete de Historia Natural. Los responsables del documento señalan que el incremento de los gases de efecto invernadero emitidos a la atmósfera se deben, principalmente, al aumento de la combustión de carbón como fuente de energía y no tanto a la recuperación económica.
«En 2015 se quemó un 22% más carbón de lo que se quemó en 2014», ha asegurado el economista José Santamarta, que ha señalado además que buena parte del carbón fue carbón importado. Además, señala que las estimaciones de emisiones de gases, que son todavía provisionales, se realizaron al término de los diez primeros meses del año, y fueron sucedidas por un incremento del consumo de energía procedente del carbón, por lo que cree probable que la cifra final alcance el 5%. El documento presentado este jueves analiza los efectos ambientales y económicos que estaría teniendo el calentamiento global en territorio español así como las políticas que se llevan a cabo para mitigar y combatir sus efectos. Desde el punto de vista económico, han señalado, por un lado, los efectos que podría tener el cambio climático sobre la producción energética por el impacto sobre los ciclos hidrológicos y los flujos de viento. Además, han señalado que, por ejemplo, en regiones como Galicia, es posible que se incremente la producción de uvas pero que baje la calidad y la rentabilidad de las variedades locales, que «se verían muy afectadas».
«Tenemos que entender que el cambio climático no es solamente que desaparezcan o se extingan especies, que eso es grave, sino que afecta a nuestro sistema económico», ha manifestado el técnico medioambiental y cartógrafo Raúl Estévez. En cualquier, caso, en el plano de la fisonomía y funcionamiento de los ecosistemas de España, los responsables del documento han puesto el foco de forma particular sobre la cuenca mediterránea y han advertido de que es uno de los «puntos calientes» del cambio climático. «Durante años se han hecho estudios y se ha llegado a la conclusión de que hace mucho tiempo el norte de África se desertificó y que esa desertificación está subiendo hacia el norte, hacia Europa –ha indicado el geógrafo Carlos Alfonso–. Se ha constatado que en todo el Mediterráneo están desapareciendo las tormentas de verano. Todo el ecosistema depende entre un 20% y un 25% de las lluvias de verano». En todo caso, señalan que las consecuencias del calentamiento global se extienden a todo el territorio nacional y que, tenga o no un origen antropogénico, «el hecho es que existe», por lo que «las soluciones han de ser de una envergadura enorme y no se pueden constreñir a ciertas zonas como se ha hecho hasta ahora».
TRES MAPAS PARA HACER UN SEGUIMIENTO PERMANENTE
Tres mapas interactivos actualizados permanentemente en Internet permitirán realizar un seguimiento de los efectos «comprobados científicamente» que el Cambio Climático tiene en diversos puntos de España. El primero de los mapas, según han explicado sus responsables, recoge y distribuye geográficamente las evidencias de modificaciones ambientales asociadas al cambio climático que «están justificadas científicamente», por ejemplo, en las modificaciones de os registros climáticos, las poblaciones y comportamientos de determinadas especies o modificación de los recursos hídricos. Un segundo plano mapea las emisiones de gases de efecto invernadero por comunidades autónomas atendiendo a distintos parámetros, como el volumen de emisiones por cada mil habitantes o su distribución en función de la actividad económica.
10 EMPRESAS GENERAN EL 65% DEL CO2 EN ESPAÑA
Además, un tercer mapa localiza las 900 instalaciones españolas que emiten mayor volumen de gases de efecto invernadero,y permite aplicar un filtro para localizar las diez infraestructuras que más CO2 liberan. «Un dato importante es que diez empresas españolas son causantes del 65% del CO2 –han asegurado los responsables del estudio durante su exposición–. Habría que hablar con ellas si verdaderamente queremos reducir las emisiones.» Los mapas estarán disponibles para su consulta a través de Internet y sus responsables se han comprometido a seguir mejorándolos e incorporar nueva información durante los próximos años. «Es una primera versión y posiblemente evolucione», han señalado. El objetivo del proyecto, según ha explicado el profesor de Investigación del Museo Nacional de Ciencias Naturales (CSIC) Jorge Lobo es constituir un «ejemplo apabullante de los efectos del cambio climático». «Cualquier pretensión de cambio en los sistemas económicos va aprovocar una gran oposición por parte de los poderes económicos, es lógico. Por eso es necesario que haya evidencias claras», ha señalado.
Fuente: Econoticias