Por Alejandra Ramírez
Es un hecho que cada vez más gobiernos y empresas se preocupan por el bienestar de sus grupos de interés tanto nivel físico, como emocional, pues se han vuelto conscientes del importante papel que la felicidad juega en el desarrollo de las personas.
La Comisión Consultiva Nacional de Seguridad y Salud en el Trabajo (Coconasst) reconoció que el estrés es una enfermedad que afecta significativamente el desempeño laboral, ya que nos agota mental y físicamente. La alegría por el contrario nos permite sentirnos bien, influir en otros y mejorar nuestro rendimiento.
¿Sabías que eres mejor en matemáticas cuando te sientes feliz?
Un estudio de la Universidad de Warwick reunió a un grupo de personas para realizar una sencilla prueba matemática y encontró que, luego de ver un programa de comedia por unos minutos, las personas aumentaron su eficiencia un 10% al resolver sencillos ejercicios, mientras quienes fueron expuestos a un video aburrido redujeron su rendimiento.
En febrero de este año, los Emiratos Árabes Unidos formaron el Ministerio para la Felicidad con el objetivo de implementar iniciativas que promuevan la cultura de la alegría y la positividad; mientras que en la India, el gobierno del estado Madhya Pradesh anunció que también se comprometería con esta causa y creo su propia organización.
Sin embargo hoy estos esfuerzos enfrentan un nuevo enemigo: el internet y las redes sociales.
A pesar de que conecta a gente de todo el mundo, la comunicación online sigue sin ser la mejor opción para promocionar la felicidad, no solo porque en ocasiones hay demasiada negatividad o cyberbullying, sino porque aparentemente estar en contacto constante con información sobre el éxito de los demás puede deprimirnos y provocarnos envidia.
El rol de las empresas
Para prevenir y contrarrestar estos daños es importante que las empresas, al definir una política de redes sociales al interior de sus espacios de trabajo, contemplen la posibilidad de ofrecer a sus colaboradores consejos para el manejo de sus propios perfiles a fin de proteger su salud emocional y al mismo tiempo ayudarles a alcanzar su máximo potencial en términos de productividad.
En una publicación reciente, The Guardian ofrece algunos tips que te serán útiles para compartir con tus colaboradores o compañeros de trabajo e incluso para ponerlos en práctica en caso de que detectes que revisar tus noticias de Facebook te ha generado la sensación de que tus amigos son más felices o tienen un mayor número de éxitos; esto te ayudará a evitar que las redes sociales absorban tu alegría.
Primero que nada, no te angusties si no tienes más de 30 amigos en tu perfil. Un estudio canadiense reveló que incrementar la cantidad de amistades que tienes en redes sociales no tiene ningún impacto positivo en tu bienestar, mientras que hacer nuevos amigos en el mundo real aumenta visiblemente tu alegría.
Sé menos pasivo y más activo en tu muro de Facebook. Si solo ves las historias de los demás, es más probable que te sientas triste; por el contrario, si también compartes un poco de lo que has vivido o adónde has viajado es menos factible que te sientas un poco deprimido.
Si compartir o comentar en Facebook no es lo tuyo, no hay problema, solo procura elegir bien qué contenido miras y cuál no. Ver las publicaciones de un amigo que es cercano en la vida real, no te provocará envidia sino que te motivará para que tú también cumplas metas.
¿Aún te sientes un poco desanimado cuando revisas tus redes sociales? Youtube y sus famosos videos de gatitos son la mejor opción para animarte. No es broma, incluso hay un estudio que publicó la Universidad de Indiana sobre este tema. Y si necesitas más mininos para alegrar tu día, siempre puedes disfrutar del Cat Film Festival.
Con información de The Guardian
