Expertos en medicina resaltan que la pastilla del día siguiente se toma como un método anticonceptivo regular en el país
Para evitar un embarazo no planeado las mexicanas utilizan de manera desmedida la pastilla de emergencia, sin tomar en cuenta que su ingesta frecuente genera importantes daños a la salud, alertó David Vázquez Romero, gerente de unidad de negocios de los laboratorios Liomont.
En lo que va de este año hubo un abuso en el consumo de este anticonceptivo, también conocido como la píldora del día siguiente o del día después.
Incluso, agregó el economista, de acuerdo con los más recientes reportes de ventas del mercado de anticonceptivos orales en México, la pastilla de emergencia fue la más vendida, con 6.8 millones de unidades, lo que representa 42% del total de los anticonceptivos hormonales de dicha industria.
Mientras que los anticonceptivos orales de bajas dosis sólo desplazaron cinco millones de unidades, es decir, 31% de las ventas.
“Estos datos indican que la pastilla de emergencia se toma como un método anticonceptivo regular en nuestro país”, indicó.
Al no requerir receta médica se propicia que grupos vulnerables de
adolescentes —que recién inician su vida sexual— usen sin control la píldora del día siguiente ante las deficiencias que tienen en materia de educación sexual y la falta de conocimiento respecto de los peligros que conlleva el uso repetido de este fármaco, reiteró el especialista.
La píldora de emergencia tiene indicaciones muy precisas: falta o falla de algún método anticonceptivo o relación sexual forzada o violación. Sin embargo, las pacientes la consumen regularmente sin tener ningún tipo de asesoría médica, advirtió Manuel Gómez Rodríguez, ginecólogo del Hospital Ángeles México.
“Es innegable que esta pastilla representa un avance muy importante, pero por desgracia su uso aún no se entiende. Las mujeres llegan a las farmacias y se las venden indiscriminadamente.”
Falta información
De acuerdo con cifras del Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA), en México, los jóvenes inician su vida sexual entre los 15 y 19 años en promedio, 97% conoce al menos un método anticonceptivo; no obstante, más de la mitad no utilizó ninguno durante su primera relación sexual.
Problema muy serio si se tiene en cuenta que 17% de los nacimientos totales en el país corresponden a mujeres menores de 20 años; aunado a que las probabilidades de que las jóvenes de entre 15 y 19 años mueran durante el embarazo o el parto son dos veces mayores que las de una mujer de entre 20 y 30 años, señala la organización.
“Muchas mujeres creen todavía en el mito que dice que en la primera relación sexual no se van a embarazar y cuando esto ocurre recurren, tanto en la pastilla de emergencia como al aborto, salidas para evitar un embarazo no deseado”, indicó Gómez.
“Incluso hay pacientes que utilizan la píldora dos o tres veces en un mes, sin saber que existen efectos secundarios por altas dosis de hormonas”, agregó el profesional de la salud, quien además es miembro del Colegio Nacional de Docencia e Investigación en Colposcopia (Conadico).
Los efectos secundarios más comunes que puede provocar la pastilla del día después son dolor abdominal y en los senos, cefalea, náuseas, mareos y fatiga, entre otros.
“Su uso desmedido también genera irregularidad en la menstruación, a tal grado que la paciente es incapaz de identificar si tiene un retraso o ya está embarazada, además produce alteraciones en la fertilidad a largo plazo.”
¿Cómo funciona?
La pastilla de emergencia se toma dentro de las primeras 120 horas, es decir, hasta cinco días después de la relación sexual no protegida, aunque cabe señalar que alcanzan casi 100% de efectividad si se toma en las primeras 24 horas, afirma la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Recomendación
Los servicios de planificación familiar informa que:
– Después de tomar la pastilla de emergencia se recomienda la abstinencia sexual o la utilización de métodos locales, como el condón, hasta que se presente la menstruación.
– No es conveniente utilizar este método en forma regular, porque su efectividad es menor a la de los anticonceptivos orales usados en forma convencional.
– La prescripción de la píldora debe acompañarse de información en torno a éste y otros métodos anticonceptivos por parte de un profesional de la salud.
– Una vez generado el embarazo, la pastilla de emergencia no es efectiva. Por lo que tampoco debe utilizarse para inducir la menstruación en caso de falta de ella.
– Si el método falla y queda embarazada, la píldora no le causa efectos colaterales a ella ni al producto.
– La pastilla del día siguiente no protege de las infecciones de transmisión sexual, incluido el VIH/Sida.
– Los anticonceptivos hormonales evitan la ovulación, previniendo así un embarazo no deseado:
– Pastillas o píldoras: Su presentación más común es de 21 o 28 pastillas. Se toma una diaria a la misma hora. Además de su efecto anticonceptivo, algunas ofrecen otras ventajas, como disminuir el flujo menstrual, combatir el acné y reducir las molestias de la menstruación.
– Implantes: Son pequeños tubos que contienen hormonas y que se introducen bajo la piel, generalmente en la parte interna del brazo.
Fuente: Excelsior
