A propósito del Día Mundial del Hábitat, Naciones Unidas instó hoy a las autoridades de los países a potenciar modelos sustentables de transportación en las ciudades para reducir la contaminación.
El transporte urbano es una de las mayores fuentes de emisión de gases de efecto invernadero y un causante de enfermedades para las personas, como resultado de la contaminación del aire y por el ruido, señaló el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon.
Entre las iniciativas de manejo sostenible propuestas por el ente mundial están: disminuir el uso de vehículos, fomentar la transportación pública con trenes y buses, el empleo de la bicicleta y la caminata.
Por su parte, el director ejecutivo de ONU-Hábitat, Joan Clos, convocó a acercar a las personas los servicios y facilidades requeridas, en aras de garantizar que la solución a los problemas actuales sea más una cuestión de planificación que de aumentar la infraestructura del transporte.
Anualmente se celebra el primer lunes de octubre como el Día Mundial del Hábitat, con el fin de motivar a la reflexión de los estados sobre el tema de las ciudades.
La semana pasada, Naciones Unidas abordó en un foro la cuestión del hábitat, en el que el presidente de la Asamblea General, John Ashe, pidió renovar el compromiso con acciones a largo plazo a favor de una urbanización sustentable.
Según advirtió, más de mil millones de personas y centros económicos y financieros del planeta están en peligro por el impacto del cambio climático, lo que demanda políticas sustentables para las ciudades.
Un reciente informe del Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático refleja de manera inequívoca el calentamiento global y su impacto en la elevación del nivel del mar, fenómenos con casi total seguridad causados por el hombre .
Tal escenario confirmado por los científicos representa una amenaza para las zonas costeras y las ciudades bajas, en particular las ubicadas en países subdesarrollados y pequeñas islas, apuntó.
Ashe recordó los daños dejados por eventos extremos asociados al actual panorama del clima, como el azote en octubre del año pasado del huracán Sandy y en 2004 del meteoro Iván.
No se trata de hechos aislados, sino parte de una tendencia que debemos seguir a la hora de establecer políticas urbanas, dijo entonces.
Fuente: Prensa Latina.
