Por: María José Evia Herrero
Dado que cada vez más empresas en Estados Unidos y Europa demandan políticas de responsabilidad social en la cadena de valor, China quiere ayudar a sus empresarios e inversores a tener un buen desempeño ambiental en el extranjero. Con este objetivo, el Ministerio de Comercio y el Ministerio de Protección Ambiental lanzaron a inicios de este año sus Directrices de protección ambiental para la cooperación e inversión hacia afuera de China, que pretenden estandarizar las actividades de inversores chinos en temas ambientales. Estas directrices son una respuesta directa a críticas que han recibido inversiones chinas en Europa.
Según el vocero del Ministerio de Comercio, la responsabilidad social corporativa ayuda a aumentar la competitividad de las empresas e inversiones chinas en el mercado global. Las directrices no se centran solamente en lo ambiental, sino que también cubren aspectos como la cultura y las diversas legislaciones locales. Además, se anima a las empresa a que creen sus propios marcos de responsabilidad y sustentabilidad según sus necesidades e industrias.
En total, son 22 las disposiciones recomendadas por el gobierno chino, que incluyen:
• Conservación ambiental: análisis de los impactos ambientales potenciales y desarrollo de un plan de manejo de riesgos ambientales, así como mecanismos de monitoreo, evaluación y reportes.
• Desarrollo comunitario: creación de un plan de desarrollo comunitario a largo plazo basado en áreas potenciales de impacto.
• Compromiso con stakeholders: comunicación con grupos de interés locales, que deben ser involucrados en la estrategia de negocios para lograr la licencia para operar.
Dado el rápido crecimiento de la industria china, así como su creciente presencia en el ámbito internacional, el gobierno está dándoles herramientas para triunfar en el extranjero. A nivel local, el gobierno chino acaba de admitir que el exceso de químicos usados en las fábricas está causando enfermedades graves en su población y también aprobó penas más estrictas para quienes dañen el medio ambiente. Estas penas seguramente serán polémicas tanto dentro como fuera del país, ya que no se centran en acabar con la corrupción sino en castigar más duramente a los acusados. Sin embargo, hablan de la importancia que el país le está dando a las prácticas empresariales responsables.
Fuentes:
GreenBiz
China Daily
El País
