El Día de Reyes es una fecha importante para más de un millón de niñas y niños que viven en la Ciudad de México y que cada año esperan recibir un regalo, incluyendo a los pequeños que pasan sus días en el hospital. Lo cual implica un gasto para las familias de entre 500 y 1,000 pesos en promedio; sin embargo, derivado de distintas circunstancias, en algunas ocasiones no llegan los presentes.
Esta situación aqueja especialmente a los menores que viven condiciones médicas de gravedad, cuyas familias no cuentan con los recursos para comprar juguetes además de solventar los tratamientos. Es por ello que para ayudar a estos hogares se organizan eventos como colectas y apadrinamientos, porque las donaciones a niñez vulnerable contribuyen a la alegría y el desarrollo óptimo en la infancia.
Recordemos que, durante los primeros años de vida, las personas necesitan atención, seguridad, afecto y juego, aparte de una buena alimentación y actividad física. Y, ya que cubrir todas estas áreas es la base para que niñas y niños puedan vivir una vida plena, distintas organizaciones de la sociedad civil y del sector privado han encontrado maneras de apoyar convirtiéndose en Reyes Magos.
La RS de las donaciones a niñez vulnerable
Reconociendo la necesidad de acompañamiento que tienen niñas y niños que atraviesan por tratamientos médicos complicados, y como parte de su Responsabilidad Social (RS), la Fundación Pablo Landsmanas (FPL) —brazo social de Corporativo Kosmos, la empresa de servicios de alimentos más grande del país— contribuyó a una noble causa para el bienestar de los pacientes del Hospital Infantil de México «Federico Gómez».
La FPL se distingue por tener diversos pilares: alimentación, desarrollo sustentable, atención humanitaria, educación y salud. Y es en este último en donde ha fijado su atención para sumarse al proyecto de la Fundación Tukonmigo con motivo del Día de Reyes, repartiendo juguetes y dulces para que los menores pudieran pasar un momento agradable en las inmediaciones del Deportivo Parque Lira en la Delegación Miguel Hidalgo de la CDMX.
«Es como quitarles un peso de encima, porque a lo mejor los padres no pudieron darle algo, pero aquí tenemos gente que lo puede hacer de todo corazón. […] Esta causa me mueve mucho, porque hay muchos niños en el hospital y nuestra intención es hacerlos felices».
María Teresa Aragón Andrade, presidenta de la Fundación Tukonmigo.
A través de eventos como este, se busca generar alianzas estratégicas entre los sectores público y privado, así como con la sociedad en general. Puesto que mejorar la calidad de vida en la infancia es una meta que puede salvar vidas y traer esperanza a través de donaciones a niñez vulnerable. Además, la Fundación Tukonmigo, con su trabajo continuo, ha logrado sensibilizar a las personas respecto a las enfermedades crónicas y graves que afectan a niñas y niños en nuestro país.
La RS por una sociedad mejor
Las necesidades básicas en la infancia abarcan desde el bienestar físico hasta la interacción social y el uso de la imaginación. Entonces, el juego también es parte fundamental del desarrollo integral en los primeros años de vida, ya que «amplía y potencia los recursos intelectuales, sociales y físicos, especialmente en los niños».
Por ello, el evento de Día de Reyes es una expresión de la preocupación que tienen tanto la FPL, como la Fundación Tukonmigo y los demás aliados, entre los que destaca el personal de «La Cosmopolitana» en CEDA —empresa mexicana con dedicada a proveer servicios integrales de alimentación y servicios generales—, el cual regaló pelotas a los beneficiarios.
Su aportación fue de 200 y 326 bolsitas de dulces, mientras que Pilares, a través de las oficinas generales de CEDA otorgó 57 pelotas. Por su parte, Fundación TUPAC obsequió 50 pelotas.
Gracias a este esfuerzo en conjunto, niñas y niños recibieron un regalo personalizado que cumplía con lo que habían pedido a los Tres Reyes Magos en su carta. Lo que llenó de felicidad a madres y padres de familia, ya que atender las complicaciones médicas de los menores les ha impedido celebrar esta especial fecha.
«Me siento muy dichosa, ya que, desafortunadamente, los Reyes pasados mi hija estaba internada, y ahora estoy contenta de que ella pueda disfrutar con todos los niños este día tan importante».
Adriana Torres Ortiz, madre beneficiaria.
Asimismo, como señala María Teresa Aragón Andrade, presidenta de la Fundación Tukonmigo, vivir con padecimientos y condiciones médicas es complicado, sobre todo durante la infancia. Esto debido a que este sector de la población necesita sentirse incluido en las actividades que realizan todas las demás personas, y es ahí donde radica la importancia de las donaciones a niñez vulnerable.
Dar regalos también es RS
Proyectos como este no se tratan simplemente de actos caritativos, sino que son inversiones sociales para solucionar problemas que aquejan a nuestras comunidades. Hoy, las donaciones a niñez vulnerable satisfacen las necesidades básicas de la infancia en cuanto a atención e interacción, logrando integrar a un sector que se ha visto desfavorecido por circunstancias médicas y socioeconómicas.
Las labores de responsabilidad social que realiza la FPL, entonces, no solo buscan que las situaciones adversas se resuelvan momentáneamente, sino que trabaja constantemente para disminuir y eliminar las brechas sociales. Esto por medio de sus pilares, pero en fechas especiales como el Día de Reyes, el apoyo que brinda se amplía para responder a las necesidades de los sectores menos favorecidos.
«Veo a las otras mamás, que son fuertes y tienen que luchar día a día con la enfermedad, porque no saben si sus niños van a seguir ahí. Por eso, cuando veo las sonrisas de los niños y niñas, al recibir un juguete, me voy bien pagada».
Deyra García Calixto, voluntaria de la Fundación Tukonmigo.
Convertirse en un Rey Mago es también Responsabilidad Social, ya que las organizaciones como la FPL y Fundación Tukonmigo quieren darle a la infancia la posibilidad de desenvolverse y desarrollarse en condiciones de igualdad. Asimismo, buscan inspirar a que más personas se sumen y adquieran conciencia de las dificultades que enfrentan más de 50 mil menores tan solo en la Ciudad de México.
Si tú también quieres ser parte del cambio, sigue el ejemplo de la FPL y dibuja sonrisas en los rostros de niñas y niños que quieren jugar como todos los demás. ¡Acércate a la Fundación Tukonmigo y apadrina a alguien!