Por Karina Castillo
Llega la mitad del año y con ello el compromiso de un gran número de organizaciones por comenzar a materializar los objetivos planteados para el 2015; la mayoría, como es de suponer, tendientes a la continuidad y éxito del negocio.
Estrategias en finanzas, recursos humanos, operaciones , entre otras; resultan el común denominador de las empresas. Pero, ¿qué sucede cuando por “encargo”
o por un genuino interés de comenzar o continuar instalando el tema de responsabilidad social, desde la dirección general te piden buscar el distintivo empresa socialmente responsable (ESR)?
A continuación, te presentamos los 5 errores más comunes al hablar del Distintivo ESR para que en caso de que este sea tu año, puedas identificarlo en sus justas dimensiones.
1. Es certificable
Partiendo desde la concepción de que la responsabilidad social es voluntaria, transversal pues involucra a todas las áreas y personas de la organización y por definición refiere a la “responsabilidad de una organización sobre los impactos de sus decisiones y actividades en la sociedad y el medio ambiente” (ISO 26000). El distintivo ESR no es certificable ni auditable; es un ejercicio de confianza que busca reconocer las buenas practicas de las organizaciones empresariales que, como cualquier sistema de gestión, debe ser justificado, instalado, medido, e idealmente, ir mostrando una mejora continua.
2. Es filantropía
Si bien el hecho de realizar patrocinios o donaciones de cualquier tipo representa un factor de vínculo con la comunidad; no es todo el universo de la responsabilidad social. En el pasado era así justamente como se concebía el tema; hoy sabemos ésta, es solo una pequeña parte del universo de las organizaciones socialmente responsables, que implica tiempo, recursos e igualmente estrategia.
3. Es un absoluto
Es común pensar que al obtener el distintivo ESR automáticamente me transformo en una empresa socialmente responsable, lo cierto es que no necesariamente es así, la pregunta sería ¿qué antes tu empresa no lo era?; si por alguna situación dejaras de obtener este reconocimiento ¿dejarías de serlo?
Es por ello que este distintivo como todo lo que involucra el tema de responsabilidad social no es absoluto, requiere compromiso y como se ha dicho, mejora continua.
4. Es para grandes
El ejercicio esta diseñado para que desde grandes, medianas, pequeñas y micro empresas puedan participar en él. Entonces ¿cuál es la diferencia?, realmente el número de preguntas que se formulan, pues mientras que las grandes deben contestar alrededor de 143; MIPYMES responden únicamente 77.
En ambos casos, las preguntas están fundamentadas en temas como Calidad de Vida, Ética Empresarial, Vinculo con la Comunidad y Cuidado y Preservación del Medio Ambiente; y naturalmente serán resueltas según la madurez de la empresa en esta materia.
5. Se comunica
En realidad no se comunica y cuando se realiza, se hace mal. En mas de una ocasión me ha tocado visitar organizaciones donde el distintivo se encuentra ubicado poco menos que en el cajón; recuerda que la esencia del distintivo es reconocer a aquellas empresas que están llevando dentro de su gestión de hacer negocio, acciones y compromisos socialmente responsables; si ya lo haces, ¡comunícalo! pero antes de hacerlo, revisa aquellas prácticas o puntos relevantes en esta materia que verdaderamente merezcan ser comunicados; haz una lista de los medios con que cuentas y comienza a proyectar (en caso de obtener el distintivo) en donde lo colocarías.