Un grupo de instituciones financieras, entre las que se encuentran Morgan Stanley, Bank of America Corp. y Citigroup Inc. están introduciendo una norma de contabilidad mundial para medir el impacto climático de las transacciones financieras.
El método permite a las empresas medir las emisiones de gases de efecto invernadero vinculadas a sus préstamos e inversiones, un paso clave en el avance de los objetivos climáticos, dijo el miércoles la Asociación para la Contabilidad de Carbono Financiera en un comunicado.
En el pasado las empresas han recibido una orientación limitada sobre cómo medir su impacto.
Giel Linthorst, director ejecutivo de la secretaría de la PCAF.
La norma, que abarca los bienes raíces comerciales, las hipotecas y otras clases de activos, ayudará a las empresas a mantenerse al tanto de cómo están contribuyendo a las emisiones y permitirá las comparaciones entre las empresas, dijo.
Según información de Bloomberg News, las empresas financieras se han visto presionadas a abordar sus efectos sobre el medio ambiente, y muchas de ellas han asumido compromisos en los últimos meses. Morgan Stanley, que se unió a PCAF en julio, ha prometido eliminar las emisiones netas de sus actividades de financiación para el 2050.
Ochenta y siete empresas de todo el mundo, con un total de 17.8 trillones en activos, se han unido a PCAF y se han comprometido a informar sobre sus emisiones relacionadas con la financiación, según el grupo.
Una vez que las empresas se unen, tienen tres años para recopilar datos y comenzar a publicar informes anuales, afirmó Linthorst. El objetivo es que las empresas integren las divulgaciones sobre el clima en sus informes financieros, dijo.
La PCAF espera expandirse a 100 empresas para finales de año, y busca llegar a 250 empresas en 2022. El grupo pretende añadir más clases de activos, incluyendo bonos soberanos y bonos verdes a su estándar el próximo año.
Varias compañías dentro de PCAF, incluyendo Morgan Stanley y Bank of America, crearon el estándar durante el año pasado y buscaron retroalimentación de otras firmas financieras y creadores de políticas, comentó el grupo.