En los casi tres años que estuvo al frente de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), el panista Miguel Ángel Toscano se confrontó en reiteradas ocasiones con representantes de las industrias de restaurantes, tabacalera y farmacéutica, entre otros.
«Cuando llegué a la Cofepris en 2008 se podía fumar en cualquier espacio cerrado; hoy sólo en espacios designados para ello. Antes se podían comprar antibióticos sin receta médica; hoy sólo con receta. Antes había medicamentos de patente, genéricos intercambiables y similares; hoy estamos por culminar el trabajo para que sólo haya medicamentos que cumplan los más altos estándares internacionales», comentó la semana pasada en un evento encabezado por el Presidente Felipe Calderón.
«Nuestra más reciente batalla (es contra) los productos milagro que habían ya sobrepasado los límites de la sociedad entera por ser productos engañosos y fraudulentos», agregó.
Toscano tuvo varias fricciones con la industria farmacéutica por negarse a ampliar el plazo para la renovación de los registros para medicamentos e insumos sanitarios, así como por la aplicación del acuerdo que impide la venta de antibióticos sin receta médica.
Sin embargo, sus principales conflictos se dieron con la aprobación de la Ley General para el Control del Tabaco.
Se enfrentó tanto a la industria tabacalera, a la que se jactaba de no haber recibido nunca en sus oficinas, como con los restauranteros, quienes incluso lo acusaron de haberlos insultado en una reunión privada.
El panista acusó a la industria restaurantera de aprovecharse de la escasez de supervisores para violar la nueva ley y permitir fumar en sus instalaciones, y a la del tabaco de vender presentaciones ilegales y mantener su publicidad en espacios prohibidos.
Fuente: Reforma, Nacional, p. 4.
Reportero: Margarita Vega.
Publicada: 24 de febrero de 2011.