Imagina volar de Londres a Nueva York. Ahora, imagina que ese vuelo es impulsado por combustible procedente de la basura que diariamente se genera en Londres. Puede parecer cosa de ciencia ficción, pero pronto será una realidad, gracias a una asociación entre British Airways y Solena Fuels, la compañía que generará este combustible.
Londres ya tiene un gran sistema de reciclaje de desechos, por lo que Solena Fuels usará solamente aquella basura que no pueda ser reciclada, llevándola a su plante de producción. Por este servicio, la ciudad de Londres les pagará, lo que significa que la creación de este tipo de combustible es más sencilla que la del etanol y otros compuestos parecidos, ya que no necesita de campos de plantación y la infraestructura para recoger desechos por medio de camiones ya existe. Una vez en la planta, los desechos son convertidos en gas, y después en una sustancia que funciona como los combustibles sintéticos de carbón y gas natural que se usan en la industria de la aviación.
El sistema solamente se utilizará para cubrir el 2% de las necesidades de British Airways, pero se tienen planes para aumentar ese porcentaje, y Solena Fuels también pretende venderle a otras compañías de aviación. La empresa admite que, aun usando toda la basura generada en el mundo, este combustible no podría sustituir por completo a las opciones actuales, sino solamente un 20 o 25%. Londres genera aproximadamente 18 millones de toneladas de basura al año, de las cuales solo medio millón servirán para este proyecto.}
Además de que encuentra otra utilidad para los desechos, se calcula que este combustible reduce en un 95% las emisiones de carbono, comparado con las opciones tradicionales, y evita también las emisiones generadas por el metano, el gas generado cuando la basura se pudre en los vertederos.
Con información de:
FastCompany
