Hace unos días, los alumnos de la Universidad Anáhuac se reunieron para realizar una buena labor social, al inscribirse a ASUA Construye.
Se trató de un proyecto en el que más de 120 estudiantes participaron en la construcción de casas para familias que viven en extrema pobreza, y que, por ende, no cuentan con un hogar digno.
En dos años se han construido 25 casas de concreto y 20 de madera.
Dos de las casas construidas fueron patrocinadas por la Fundación Gigante.
(Redacción)¸ El Universal, Estilos, p. 5