Cinco comandantas del Ejército de Mujeres Mazahuas, que se lanzó a la lucha con rifles de madera en 2004 para defender sus recursos, emplazaron a la Comisión Nacional del Agua (Conagua) a cumplir los compromisos que signó ese año para dotar de agua potable a sus comunidades, si no, sostuvieron, reanudaran los boicots a la planta de tratamiento Berros y otras instalaciones estratégicas del sistema Cutzamala.
El plazo otorgado por las activistas al organismo es de 30 días.
A ocho años de que inició el movimiento y aún sin agua en más de 20 comunidades de las cuales surgen los manantiales que abastecen del líquido a la zona metropolitana y el Valle de Toluca, la organización determinó regresar a las confrontaciones.
Ayer se hicieron presentes con un plantón en la plaza cívica de esta ciudad y el montaje de una maqueta con tierra, pescados, plantas y otros elementos naturales para ilustrar y denunciar un “ecocidio” en Villa de Allende por la Conagua, a la cual también acusan de las pérdidas en más de 300 hectáreas de cultivo y de la contaminación de estanques particulares, de donde obtienen carpas para consumo y venta.
Las comandantas Ema Romero, Agustina Araujo y Catalina Marín acusaron al organismo de este desastre ya que no drenó a tiempo y adecuadamente el Río Malacate, lo que provocó el derrame de aguas pestilentes en tierras y cuerpos de agua.
Las pérdidas se estiman en siete millones de pesos, señalaron.
Los pendientes
Mencionaron que a ocho años de haber iniciado el movimiento social indígena para defender sus tierras y agua, 60% de los acuerdos signados en 2004 no se han cumplido.
Los acuerdos obligaban a la Conagua a dotar de agua potable a las comunidades de los municipios de Villa de Allende, Donato Guerra y San José del Rincón, entre otras localidades; así como la elaboración de un plan de desarrollo sustentable; centros de salud, viviendas; equipamiento de clínicas, caminos, entre otros ofrecimientos incumplidos.
Hay por lo menos cinco comunidades como Jacales, Meza de Zacango y Lomas, donde Conagua introdujo las tuberías, pero “nunca mandó el agua” y ahí están los tubos enterrados pudriéndose, indicaron.
Por esto, la comandanta Catalina Marín, la más vieja de la dirigencia del Ejército Mazahua, advierte que están dispuestas a regresar a las “armas y a dar su propia vida” hasta lograr que se cumplan los compromisos de la Comisión Nacional del Agua y les den este recurso natural a sus comunidades.
El sistema Cutzamala, integrado por al menos cuatro presas y varias plantas potabilizadoras, abastece agua diaria a 19 millones de personas aproximadamente de las 16 delegaciones del Distrito Federal y 18 municipios del Estado de México.
Fuente: El Universal
Publicada: 4 de octubre de 2012
