McDonald’s Japón ofreció disculpas a sus clientes y se comprometió a garantizar la seguridad en sus productos luego de que se encontraron objetos, incluyendo un diente, en sus productos.
Los hallazgos son los últimos en una serie de problemas para la cadena, afectada por la baja en sus ventas y por la escasez de papas fritas.
McDonald’s Japón pertenece en 49.9% a la estadounidense McDonald’s Corp.
La firma ha estado lidiando con una baja en sus ventas, que empezó mucho antes del escándalo en los alimentos del verano boreal pasado, que afectó a la confianza en sus productos.
En particular, las tiendas de conveniencia han contribuido al alejamiento de los clientes, ofreciendo rangos más amplios de comidas listas para consumo y café a bajo precio.
McDonald’s Japón comisionó en marzo pasado a la presidenta ejecutiva Sarah Casanova para que revirtiera la tendencia. Sin embargo, la empresa sigue en camino a registrar su sexto año seguido de declives en las ventas y su primera pérdida anual en 11 años.
Las disculpas del miércoles se producen luego de un incidente el fin de semana, cuando un cliente encontró una tira de vinilo de casi 4 centímetros en un Chicken McNugget.
El caso llevó a la cadena a paralizar las ventas de los nuggets que hubieran sido fabricados el mismo día que el ítem contaminado, en una planta de Tailandia.
La empresa sigue investigando la causa.
Entre otros incidentes, en agosto, un cliente encontró un diente humano en sus papas fritas, mientras que en diciembre un niño se cortó la boca con un pedazo de plástico que estaba en un sundae de chocolate.
En una conferencia de prensa, los ejecutivos trataron de asegurar al público de la seguridad de los alimentos de McDonald’s.
«Yo tengo la confianza para que mi familia pueda comer productos de McDonald’s», dijo Takehiko Aoki, vicepresidente senior de McDonald’s Holding Co (Japón) Ltd.
«Creo que nuestra respuesta ha sido apropiada», dijo Aoki al ser consultado sobre si la empresa había sido lenta en anunciar sus hallazgos, explicando que el manejo de cada caso es distinto.
McDonald’s Japón llevaba apenas seis meses comprando los nuggets a tres plantas en Tailandia. El cambio buscaba impulsar la confianza en la calidad de sus productos luego de que su proveedor chino Shanghai Husi Food Co Ltd fue acusado de vender carne vencida.
El lunes, sólo días después del último hallazgo, McDonald’s Japón retomó la venta de todas los tamaños de porciones de papas fritas, por primera vez en tres semanas.
Una disputa laboral en los puertos de la costa oeste de Estados Unidos ha demorado las importaciones, lo que obligó a la empresa a racionar las porciones.
Las acciones de McDonald Japón cerraron con una baja de 0.9% este miércoles, frente al avance de 0.3% en el índice Jasdaq.
Fuente: El Economista