Una nueva investigación ha encontrado que menos de 200 empresas multinacionales y sus proveedores asociados representan la mayoría de las emisiones industriales de gases de efecto invernadero (GEI), responsables del cambio climático, y muchas de ellas carecen de estrategias adecuadas para reducir su impacto, según Edie.
Las empresas desempeñan un papel importante en los objetivos climáticos globales, como limitar el calentamiento del planeta a 1.5°C, y asumir su Responsabilidad Social Empresarial (RSE) para impulsar el progreso hacia sociedades más sostenibles. Sin embargo, este estudio pone de manifiesto la existencia de brechas entre la intención y la acción, así como la falta de políticas y estándares globales que aceleren el compromiso y los resultados.
Urge reducción de emisiones
Las corporaciones desempeñan un papel descomunal en el cambio climático global, ya que son responsables de la producción de casi todo lo que compramos, usamos y desechamos. Sin embargo, según un informe reciente realizado en colaboración por el Banco Mundial y CDP, una organización internacional sin fines de lucro que se dedica a la divulgación ambiental, la gran mayoría de estas empresas carecen de estrategias sólidas para abordar y mitigar adecuadamente sus propios impactos ambientales.
Esto significa que, a pesar de ser conscientes de su responsabilidad en la crisis climática, estas empresas no están tomando medidas efectivas para reducir sus emisiones de gases de efecto invernadero y otros impactos ambientales negativos. La falta de estrategias adecuadas para enfrentar estos desafíos implica que no están haciendo lo suficiente para minimizar su huella ambiental y contribuir a la solución de la crisis climática.
Preocupantemente, solo el 40 % de estas empresas se ha comprometido a lograr emisiones netas cero para el año 2050. La situación empeora aún más cuando se analizan los objetivos a corto plazo para la reducción de emisiones. Según el informe, tan solo el 5 % de las empresas multinacionales han establecido metas claras y ambiciosas para reducir sus emisiones en el corto plazo.
«Las empresas deben demostrar que están planificando a futuro para evitar los peores impactos del cambio climático y enviar las señales correctas a los mercados de capitales, los cuales seguirán siendo rentables».
Amir Sokolowski, director global de clima de CDP.
Oportunidad y riesgo frente a cambio climático
El informe revela que de las 157 empresas multinacionales analizadas, son responsables del 60% de las emisiones industriales a nivel global. Esta cifra destaca la enorme contribución de estas empresas a la crisis climática y subraya la necesidad de abordar sus prácticas y políticas ambientales.
Sin embargo, es importante destacar que las empresas responsables del cambio climático, a pesar de representar un riesgo, también representan una oportunidad para la mitigación climática. Estas empresas tienen el poder de establecer estándares de sostenibilidad o impulsar la transición hacia tecnologías limpias, lo cual podría tener un impacto significativo en millones de productores y acelerar la transición climática.
No obstante, aún existen casos de empresas multinacionales que obstaculizan y presionan para frenar el progreso hacia una transición limpia, ya sea mediante la inacción o a través de cabildeo activo en contra de propuestas de cambio.
Nicolette Bartlett, directora de impacto de CDP, hizo hincapié en que abordar el problema de las emisiones industriales de las empresas responsables del cambio climático requiere un enfoque integral que combine tanto incentivos como medidas obligatorias, como estándares más estrictos e impuestos ambientales.
Multinacionales pueden liderar el cambio hacia la sostenibilidad
El informe subraya la necesidad de implementar nuevas políticas a nivel nacional y global para fomentar y apoyar la acción sostenible por parte de las empresas multinacionales. Se propone un enfoque basado en el programa de las «5Ps», que incluye los siguientes elementos:
- Patrullaje: Hace referencia al monitoreo y seguimiento de las emisiones de las empresas, lo cual es fundamental para evaluar su desempeño ambiental y garantizar la transparencia.
- Prescripción: Se refiere a la implementación de leyes y regulaciones que establezcan estándares ambientales claros y exigibles, creando un marco normativo que guíe las acciones de las empresas.
- Sanciones: Implica la imposición de impuestos y penalizaciones a las empresas que no cumplan con los estándares ambientales establecidos. Estas sanciones financieras pueden incentivar a las empresas a adoptar prácticas más sostenibles.
- Pagos: Hace referencia a los incentivos y apoyos fiscales que se ofrecen a las empresas que toman medidas sostenibles. Estos incentivos pueden incluir beneficios fiscales, subsidios u otros mecanismos financieros que promuevan la adopción de prácticas más sostenibles.
- Persuasión: Se refiere a los compromisos corporativos voluntarios y la divulgación de información sobre el desempeño ambiental de las empresas. Esto puede incluir la publicación de informes de sostenibilidad y la adopción de metas claras en términos de reducción de emisiones y prácticas sostenibles.
«Las temperaturas globales ya están alcanzando un umbral crítico. Esta nueva e importante investigación resalta la necesidad de políticas audaces y urgentes que nos alejen del borde del abismo».
Nicolette Bartlett, directora de impacto de CDP.
En conclusión, el informe resalta la necesidad de una respuesta integral y ambiciosa para abordar la crisis climática, donde las empresas multinacionales desempeñen un papel central. La adopción de prácticas sostenibles y la implementación de políticas efectivas pueden ayudar a reducir las emisiones y mitigar los impactos del cambio climático, protegiendo así el futuro del planeta y las generaciones venideras.
ES ABSOLUTAMENTE NECESARIO CONVOCAR UN GRUPO MUNDIAL DE SABIOS Y CIENTIFICOS PARA ELABORAR UN PLAN DE EMERGENCIA 2030-2050