El Senado mexicano ha aprobado una reforma de ley que permite que los enfermos terminales puedan solicitar legalmente la eutanasia pasiva, una modificación que había sido aprobada ya en abril pero a la que la Cámara de Diputados introdujo cambios relativos a los médicos que atienden a estos pacientes.
En su primera versión, aprobada hace siete meses, la ley incluía una cláusula de conciencia que permitía a los médicos negarse a aplicar la eutanasia pasiva. Con la última reforma introducida por los senadores, los médicos que rechacen atender a este tipo de pacientes están obligados a pasar el caso a otro colega.
La eutanasia pasiva consiste en dejar de suministrar los medicamentos o retirar los aparatos que mantienen con vida artificialmente a un paciente terminal, mientras que la eutanasia activa se provoca directamente la muerte del enfermo.
Los cambios a la Ley General de Salud en materia de cuidados paliativos fueron aprobados por 84 votos y una abstención. Por esta ley, un adulto enfermo terminal puede solicitar por escrito ante dos testigos que desea dejar de recibir un tratamiento que alargue su vida.
«El objetivo es que los pacientes terminales tengan derecho a pedir la suspensión de su tratamiento», dijo el presidente de la comisión de Salud, el senador Ernesto Saro Boardman, al hablar a favor del dictamen. Y afirmó que todo tratamiento que pretenda prolongar inútilmente la vida del enfermo se conoce como «ensañamiento terapéutico».
Cuidados paliativos a domicilio
«Se pretende que los enfermos terminales puedan morir rodeados de sus seres queridos, de preferencia en su casa, y evitar que se prolongue su agonía a través de medios artificiales», agregó el legislador del Partido oficialista Acción Nacional (PAN).
El dictamen especifica que todos los enfermos terminales podrán recibir en su domicilio tratamientos o cuidados paliativos adecuados a su enfermedad, necesidades y calidad de vida.
También obliga a las instituciones del Sistema Nacional de Salud a ofrecer los servicios de orientación y asesoría al enfermo en situación terminal y/o a sus familiares en el caso de que los cuidados paliativos se lleven en una casa particular.
Las reformas a la Ley General de Salud en materia de cuidados paliativos fueron enviadas al Ejecutivo federal para su publicación en el Diario Oficial de la Federación.
En enero pasado, el congreso local del Distrito Federal aprobó una ley conocida como del «bien morir» que también permite a los enfermos terminales rechazar que se prolongue su vida por medio de tratamiento médico.
Fuente: ElMundo