En México existe un patrón de violaciones graves y generalizadas a los derechos humanos en contra de personas con discapacidad, en particular en instituciones mentales u orfanatos, ello contraviene las obligaciones internacionales que tiene el Estado, dijo el director ejecutivo de Disability Rights International (DRI), Eric Rosenthal.
Esta organización, con sede en Washington DC, Estados Unidos, ha trabajado en el país a lo largo de 15 años, y con base en ello exhibe que si bien la segregación y encierro de personas con discapacidad -en particular las mentales-, es una mala práctica presente en todos los países; mientras el mundo está cambiando, México no lo ha hecho, indica Rosenthal.
Entrevistado a propósito del lanzamiento del informe “Sin Justicia: tortura, trata y segregación en México” de esta organización no gubernamental, Eric Rosenthal advierte que al segregar y encerrar a una persona en una institución por motivos de discapacidad, se abre la puerta a que el staff abuse de ellos, los use como esclavos sexuales o, incluso, cobre porque sean explotados sexualmente.
“La principal violación (a los derechos humanos) de la que hablamos es la segregación por discapacidad. Es una de las formas más severas de discriminación que (…) conlleva a graves abusos”, alertó Eric Rosenthal.
Sobrevivientes de casos como el del albergue conocido como Mamá Rosa o los de Casa Esperanza se enfrentan a una vida de segregación en la que los abusos persisten al no haber alternativas a las instituciones.
La falta de servicios públicos en la ciudad de México, o en cualquier parte del país, para atender en la comunidad a las personas con discapacidad, no tiene justificación para DRI. Rosenthal recuerda que en el 2000, cuando la no gubernamental dio a conocer el informe “Derechos Humanos y Salud Mental: México”, el gobierno de México llevó las preocupaciones de las personas con discapacidad a las Naciones Unidas y patrocinó una resolución para redactar una nueva Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad (CDPD) de la ONU.
Y si bien al impulsar el CDPD, México hizo una gran contribución para estas personas en el plano del derecho internacional; “no ha hecho nada por aplicar este acuerdo”, señaló Eric Rosenthal.
En 2010, Disability Rights International (DRI) dio a conocer el informe “Abandonados y Desaparecidos: Segregación y abuso de Niños y Adultos con Discapacidad en México”, que detalla el abuso y la segregación continua de las personas con discapacidad en el país. En el 2014, el Comité de la Convención de las Naciones Unidas de los Derechos de las Personas con Discapacidad instó al Estado Mexicano a cumplir sus obligaciones a nivel internacional y poner fin a la segregación.
La investigación más reciente de DRI en la ciudad de México revela que, a pesar de toda la presión internacional, todavía hay una falta de supervisión y rendición de cuentas de las instituciones de custodia para niños. México no ha cumplido y sigue sin cumplir sus obligaciones más básicas bajo el derecho internacional hacia una de sus poblaciones más vulneradas.
“Una de las razones por las cuales decimos que México es el peor en el mundo es porque saben que se cometen actos de tortura (en las instituciones) y (…) no han hecho nada”, advirtió el organismo.
Fuente: El Economista