• Paquete de créditos por US$210 millones del BID, el Fondo de Tecnología Limpia, y la Nacional Financiera de México permitirían atraer más US$1.500 millones en inversiones
El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) aprobó un préstamo concesional de US$70 millones para impulsar el financiamiento para energías renovables en la generación eléctrica en México y reducir así las emisiones de gases de efecto invernadero.
Los recursos, provenientes del Fondo de Tecnología Limpia, servirán para movilizar por lo menos una cuantía similar de recursos del banco de desarrollo estatal Nacional Financiera (NAFIN) de México y se sumarán a US$70 millones de una línea de crédito aprobada por el BID en 2009, logrando un monto combinado de por lo menos US$210 millones.
El Fondo de Tecnología Limpia, uno de los dos Fondos de Inversión en el Clima para el cual el BID sirve de agencia implementadora, ofrece financiamiento para la demostración, despliegue y transferencia de tecnologías con un potencial de ahorro importante en las emisiones de gases de efecto invernadero. El CTF financia programas en 12 países en todo el mundo.
“Esperamos generar un efecto demostrativo para alentar a otras entidades financieras mexicanas a participar de estos tipos de proyectos”, dijo Ramón Guzmán, Jefe de Equipo del proyecto del BID. “El programa proveerá préstamos directos a entidades promotoras de proyectos de generación de energías renovables y aportará líneas de crédito para cubrir eventuales déficits de flujo de caja”.
El objetivo es movilizar, adicionalmente a los recursos del BID y de NAFIN, más de US$1.500 millones por parte de otras instituciones financieras. Eso permitiría concretar inversiones en plantas generadoras de energía renovable con un costo total de US$2.500 millones.
Se espera que dicho financiamiento facilite la construcción de por lo menos 10 centrales de energía renovable, en particular plantas de energía eólica y pequeñas plantas hidroeléctricas, para lograr una ampliación de la capacidad instalada de generación verde de unos 1.000 megavatios. Una vez que entren en servicio, estas plantas permitirían un ahorro en las emisiones de gases de efecto invernadero equivalente a dos millones de toneladas de CO2 al año.
El préstamo del BID es a 20 años de plazo, con un período de gracia de 10 años, y a una tasa de interés reducida.
Fuentes: Comunicado de Prensa.