México se asegurará de integrar en las negociaciones internacionales sobre el cambio climático en noviembre en Cancún a los países en desarrollo que se sintieron ignorados durante la conferencia de Copenhague, declaró ayer el jueves el embajador mexicano para el clima.
“Algunos países en desarrollo se sintieron excluidos (en Copenhague). Por ese motivo nos esforzamos desde principios de año para dar respuesta a sus preocupaciones. Reservamos una atención especial a esos países que no sintieron que sus posiciones se tomaran suficientemente en cuenta”, declaró Luis Alfonso de Alba en rueda de prensa en Estocolmo.
A una pregunta sobre los países concernidos, el negociador mexicano mencionó a varios latinoamericanos, entre ellos Bolivia, Nicaragua, Ecuador, Perú y Chile, que en su mayoría rechazaron el Acuerdo de Copenhague.
En el continente asiático, hizo alusión a Indonesia, Malasia, Filipinas y Corea del Sur, así como a Pakistán y a los países del Golfo. El mexicano dijo que su país tuvo en cuenta a África.
El Acuerdo de Copenhague, declaración política sin vinculación jurídica, fijó como objetivo limitar el alza de la temperatura del plañera a dos grados centígrados, pero sin precisar por qué medios. Fue negociado a última hora por un pequeño grupo de jefes de Estado que representaban a países ricos o naciones en desarrollo. Muchos países “pequeños” expresaron su frustración por haber sido excluidos de la fase final de negociaciones.
“Está muy claro para nosotros que se debe incluir a todo el mundo, no sólo a los grandes emisores (de CO2). Es así como funciona la ONU para llegar a un acuerdo general. Cada parte debe sentirse propietaria de la decisión final”, afirmó De Alba. “Eso no significa que hemos olvidado a la UE y a otros grandes actores”, aseguró. La conferencia sobre cambio climático tendrá lugar en Cancún, del 29 de noviembre al 10 de diciembre.
Fuente: Excélsior; Global, p. 6
Publicada: 13 de agosto 2010