México no podrá cumplir con la meta de reducir 20 por ciento las emisiones de gases contaminantes en 2020

México no podrá cumplir con la meta de reducir 20 por ciento las emisiones de gases contaminantes en 2020 mediante la construcción de plantas de generación de energía limpia, por lo que debe apostar por programas de eficiencia energética que permitan reducir y mejorar su uso, opinó Jean-Luc Vieux-Pernon, vicepresidente de energía de Schneider Electric México.

En entrevista, el ejecutivo de la compañía francesa especializada en sistemas para la administración de energía, consideró que el país planteó dos metas ambiciosas y agresivas, difíciles de cumplir, como reducir la emisión de Gases de Efecto Invernadero (GEI) -Programa de Cambio Climático- y aumentar a 35 por ciento la generación de energía limpia hacia 2024 -Estrategia Nacional de Energía.

Explicó que proyectos de energía eólica, solar y de geotermia serán insuficientes para alcanzar el objetivo previsto por México, toda vez que proyectos eólicos e hidroeléctricos han encontrado barreras sociales por la oposición de algunas comunidades aledañas a las obras, donde las peleas «han sido fuertes».

Además existen factores económicos que atrasan el desarrollo de proyectos de generación de energía proveniente de fuentes limpias, porque en algunos casos el precio de compra por kilovatio/hora que establece la Comisión Federal de Electricidad (CFE) no justifica la inversión y tampoco genera el retorno de inversión adecuado a los productores privados.

Hay proyectos para la producción de energía limpia, pero avanzan a una velocidad que no va a permitir al país el porcentaje que desea de adicionar entre cinco mil y seis mil Mw. «Es un reto bastante fuerte», apreció.

El entrevistado aceptó que permitir la deducción fiscal del Impuesto sobre la Renta a las inversiones en proyectos de eficiencia energética o generación de fuentes limpias representa un incentivo para el desarrollo de esas acciones, pero lo consideró insuficiente en comparación con otros países como Dinamarca o España.

Por lo tanto, insistió en que el desarrollo de centrales de generación de energía solar, geotérmicos, eólicos e hidroeléctricos serán insuficientes para cumplir con el objetivo establecido, de ahí la necesidad de que el país analice como una opción viable la construcción de más centrales de energía nuclear adicionales a Laguna Verde, en Veracruz, que opera en México.

Recordó que el 80 por ciento de la energía que utiliza Francia proviene de fuentes nucleares y en Japón 40 por ciento, mientras que el territorio mexicano sólo tiene una capacidad de 750 Mw, lo que corresponde a menos de 5 por ciento de los 50 mil Mw instalados en el país.

Aclaró que aun cuando México decidiera poner en marcha un programa de energía nuclear, sería imposible arrancar una nueva planta de esa naturaleza antes de 2023 o 2025, por lo que insistió en la complicación que enfrenta el país para cumplir con la ambiciosa meta.

Opinó que una forma adicional para cumplir los objetivos tanto de aumentar la energía limpia como de disminuir las emisiones de GEI y contribuir a disminuir el impacto del cambio climático, es mediante la adopción de sistemas y hábitos para el uso racional de la energía.

«La mejor manera y la más rápida para lograr esas metas es reducir el consumo y mejorar la eficiencia energética», aseveró, por lo que consideró que el impulso del gobierno federal a programas como la sustitución de focos incandescentes por lámparas ahorradoras o el cambio de refrigeradores y equipos de aire acondicionado por aparatos que consumen menos energía, son medidas correctas para alcanzar los objetivos.

Refirió que Schneider Electric lleva a cabo un programa de monitoreo de consumo de energía, agua, oxígeno y otros fluidos en 300 hospitales de la red del Instituto Mexicano del Seguro Social, con el objetivo de detectar áreas de oportunidad para volver eficiente el consumo energético. Por lo pronto, en todos ellos ya se logró una disminución de 5 por ciento, pero se espera alcanzar una tasa de 20 por ciento.

Mencionó también que en edificios públicos y privados con alto consumo de energía se pueden instalar sistemas de gestión que podrían ayudar a mejorar la utilización de los energéticos y lograr ahorros de hasta 30 por ciento en la facturación.

De esa manera, la eficiencia energética y el impulso de las energías verdes contribuirán al cumplimiento de las metas para combatir el cambio climático, expresó.

Fuente: El Financiero, Negocios, p. 55.
Reportero: Esther Arzate.
Publicada: 16 de noviembre de 2010.