Llevar una rutina más amigable con el ambiente se ha convertido en uno de los principales retos, e incluso se ha señalado a las nuevas generaciones como las primeras en poner el ejemplo con este estilo de vida sostenible.
Sin embargo, una encuesta señaló que los Millennials y Z no son tan ecológicos como lo predican y que incluso su preocupación es menor a la de las generaciones pasadas.
¿Millennials y Z no son tan ecológicos como predican?
El estudio señala que generalmente, las nuevas generaciones son señaladas por su activismo y estilo de vida que integra dietas como el veganismo, el consumo de marcas sostenibles, la preferencia por ropa vintage, entre otras cosas.
Y que incluso suelen criticar a las personas mayores por ser ellas las responsables de llevar al mundo a la situación actual en la que se encuentra, pero según una encuesta a 4.003 británicos, realizada por Censuswide para la aseguradora británica Aviva, esta percepción es errónea.
De acuerdo a los resultados, los millennials y Z , son los que menos preocupados se encuentran por el medio ambiente, y por ello sus acciones no son tan responsables. Esto pone en duda si realmente el 84% de esta generación utilizaría contenedores de reciclaje.
Existen disparidades similares con los hábitos alimenticios. Los boomers son más propensos que las personas más jóvenes a comer frutas y verduras de temporada (47% frente a 35%), a reducir la cantidad de carne que comen (34% frente a 28%) y a evitar el empaque de un solo uso (66% vs. 54%).
Al parecer, los boomers son mejores para comprar productos locales en general (63% frente a 45%) y reducir los viajes aéreos (24% frente a 21%.
¿Lo único a lo que muestran interés?
En las dos únicas áreas que mostraron interés fue en adoptar un estilo de vida vegetariano y en comprar ropa de segunda mano. Y a pesar de que también las personas más jóvenes expresan más disposición a donar a organizaciones benéficas ambientales, son las personas mayores las que realmente lo hacen.
La investigación señala que habrá gente que resalte que esta falta de donación por las generaciones más jóvenes. Esto se debe a que sus ingresos son mucho menores, lo cual comparte que podría ser el caso, pero ese argumento no se sostiene con respecto a todas las otras categorías que se midieron.
El Programa de Yale para la Comunicación sobre el Cambio Climático encontró que el 38% de los millennials están dispuestos a donar para tales causas frente al 30% de los baby boomers… ¿entonces?
La vida ecológica y los comportamientos conscientes del clima a menudo son vistos como el dominio de los jóvenes, pero esta investigación sugiere que las personas mayores están liderando silenciosamente la carga y tomando medidas para cuidar el planeta»
Zelda Bentham, jefe de grupo de Sostenibilidad para Aviva.
De hecho, consumir menos (y, por extensión, gastar menos dinero) es posiblemente una de las formas más efectivas de hacer que el estilo de vida sea más ecológico.
¿Es justa esta declaración?
Sería justo saber cuántos de los boomers que participaron en esta encuesta, son retirados y también conocer un monto aproximado de su ingreso. Ya que con esto se puede calcular el tiempo libre que tienen para poder acudir a comercios locales, utilizar medios de transporte lentos y la inversión que pueden hacer por aquellos productos sostenibles.
De acuerdo con Katherine Martinko, no se está tratando de justificar la falta de participación sino de poner en una balanza las ventajas de un boomer contra un millennials y Z.
No estoy tratando de poner excusas para las personas más jóvenes que pueden y deberían hacerlo mejor, pero sí creo que muchas son impulsadas por la conveniencia, lo que genera enormes cantidades de desperdicio. Esto tiene que cambiar, señaló.
Estos hallazgos muestran que es hora de que los Millennials , Z, boomers y demás generaciones impulsen un trabajo colaborativo en pro del medio ambiente, integren mejores rutinas, consuman de una manera más responsable y exijan a las empresas y gobierno asumir un papel a favor de mejorar la situación actual.