El África subsahariana debe lidiar con la dura tarea de eliminar el hambre en las próximas décadas, pero los expertos en alimentos y desarrollo dicen que hay una solución obvia: dar poder a las mujeres.
«Son las principales productoras de cultivos para alimentos en África», dijo Namanga Ngongi, presidente de la Alianza por una Revolución Verde en África (AGRA por su sigla en inglés), uno de los mayores productores de granos.
«Si queremos hacer un avance real en la producción de comida, deberíamos invertir en las mujeres, mejorar sus habilidades y el acceso a los recursos que necesitan», agregó.
En una entrevista al margen de las reuniones del Premio Mundial de Alimentos, Ngongi aseguró que las mujeres no necesitan más trabajo, sino tecnologías que aumenten la productividad y reduzcan la carga laboral.
Ngongi y otros funcionarios especializados en desarrollo y agricultura señalaron que las mujeres también son clave para lanzar una reforma agraria en gran parte del África subsahariana, donde la tierra a menudo es propiedad de las comunidades.
«Debe haber formas de organizar un poco mejor los derechos de las personas que son las grandes productoras de alimentos en África. Son en su mayoría mujeres que están en los cultivos para alimentos. Los hombres están en los cultivos comerciales, como cacao y café», explicó Ngongi.
«Si se quiere lidiar con el hambre, sobre todo en África, es clave centrarse en las mujeres, debido a que su rol es alimentar a la familia», dijo Ritu Sharma, presidenta de Women Thrive Worldwide, que habló en el foro.
Las mujeres en países desde Kenia hasta Liberia ahora plantan y cuidan cultivos claves como maíz, sorgo, mijo, batata, melones y arvejas. Más de la mitad de los agricultores de África son mujeres y la mayoría se ocupa de las plantaciones en pequeñas parcelas de tierra que no pueden adquirir.
«Se necesita un mejor criterio sobre los derechos de propiedad de la tierra de las mujeres. Esa es una gran falla. Si no tienes garantías de que vas a usar una porción de tierra por muchos años,
¿por qué invertirías en ese pedazo de tierra?», se preguntó Ngongi.
Un reporte de la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura que circuló en Des Moines, Estados Unidos, indicó que si las mujeres tuvieran el mismo acceso a los recursos que los hombres podrían aumentar la rentabilidad agrícola entre un 20 y un 30 por ciento.
El mayor obstáculo que enfrentan las mujeres es la discriminación, dijeron expertos y funcionarios. Las mujeres en África reciben poco entrenamiento agrícola y no tienen derechos sobre la tierra.
«Es ilegal en su país que las mujeres tengan la propiedad o, si es legal, todas las costumbres van en contra de ello. Por eso una mujer nunca puede tener su propia tierra», aseguró Sharma.
África, a diferencia de Asia, tiene un enorme volumen de tierra cultivable. Pero los rendimientos de sus cultivos están muy rezagados con respecto a los principales países productores del mundo.
«Las mujeres son clave para una agricultura exitosa en Africa», dijo Roy Steiner, vicedirector de desarrollo agrícola de la Fundación Bill & Melinda Gates.
«Quiero poder caminar entre un grupo de autoridades agrícolas africanas y no ver sólo hombres, como ocurre ahora. Dentro de diez años voy a entrar en un salón y ver mujeres sentadas a la mesa. Van a estar cambiando las prioridades y la forma en que se hacen las cosas», enfatizó.
Fuente: Informador.com.mx
Publicada: 17 de octubre de 2011.