El Mundial de futbol de este año en Brasil no estará exento de intentos por arreglar partidos, por lo que la FIFA no va a dejar nada librado a la suerte, dijo el jefe de seguridad de la entidad en una entrevista con Reuters.
Ralf Mutschke sostuvo que la FIFA incluso podría posponer un partido si tiene indicios de que es blanco de manipulaciones de parte de organizaciones criminales, pero destacó que una medida de este tipo sería el último recurso.
El arreglo de partidos se ha convertido en una gran preocupación para las autoridades del futbol en los últimos años ya que las organizaciones delictivas apuntan a jugadores clave, árbitros o dirigentes para manipular resultados y ganar grandes montos de dinero con las apuestas.
A menudo, estas organizaciones prefieren actuar en amistosos internacionales de bajo perfil y ligas nacionales en países pequeños.
Pero Mutschke, un ex agente de alto rango de la policía federal alemana, dijo que se apuesta tanto dinero en la Copa del Mundo que los criminales podrían verse tentados a actuar.
«En los partidos de la Copa del Mundo se producen grandes apuestas, hay mucho dinero involucrado, por lo tanto hay que considerar que se quieran manipular partidos del Mundial», dijo Mutschke a Reuters.
«Sería estúpido no tomar en consideración que los partidos de la Copa del Mundo podrían ser un objetivo de estas organizaciones. Nos tenemos que preparar y por supuesto no creer que el Mundial puede estar exento de estas situaciones», agregó.
Ferreo control
Mutschke dijo que habrá funcionarios de seguridad de la FIFA en cada uno de los 64 partidos del torneo que se jugará del 12 de junio al 13 de julio en Brasil.
«Tenemos una estrategia coherente para afrontar la manipulación de partidos, empezando por una evaluación del riesgo y un foco en los equipos que juegan, al igual que la etapa del torneo en que se juega el partido, si es un partido de grupo, en el inicio o el final de esta etapa», destacó.
«Si se detectan patrones de apuestas antes de un partido, tendremos una indicación más fuerte de que se está preparando el arreglo de un partido y podemos decidir que no se juegue. Si tenemos indicios de un arreglo ¿por qué vamos a permitir que se juegue? Debemos proteger la integridad de la competencia», destacó.
Mutschke sostuvo que hay una gama de acciones que se pueden tomar en este caso.
«Cancelar, posponer, detener. Es teóricamente posible (…) pero como último recurso, realmente es la última medida a tomar. Si tenemos información real, antes de un partido, si sabemos que estas organizaciones han infiltrado el partido a través de jugadores o árbitros, ésa sería una opción», explicó.
«Pero obviamente tenemos otras medidas que vamos a implementar antes que eso», agregó.
Mutschke destacó que el caso de equipos que juegan un partido en la etapa de grupos para producir un resultado que le convenga a los dos normalmente no puede ser considerado un arreglo.
Los Mundiales han vivido varios casos de estos en el pasado. El más notorio fue la victoria de Alemania Occidental 1-0 sobre Austria en 1982, un resultado que clasificó a ambos a octavos de final y dejó fuera de competencia a Argelia.
«Eso no está relacionado con mi área, es algo que yo calificaría como táctica», dijo Mutschke.
«Es como cuando hay un equipo clasificado a la siguiente ronda en la Liga de Campeones y el Mundial y no pone a los titulares porque no quiere que se le lesionen jugadores o quiere darles descanso», agregó.
Mutschke destacó que ese tipo de acciones no se reflejan en el mercado de apuestas y no es lo que él busca.
«Es una discusión de fondo y algo que debe ser evaluado respecto a cada partido. Al final, la entidad correspondiente debe evaluar y decidir respecto al caso», concluyó.
Fuente: Alto Nivel.
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