* Scotland Yard lo acusa de mentir y obstruir investigaciones sobre News of the World.
* Trabajó con delincuentes, asevera Gordon Brown.
* El gobierno le pide ceder mando de tv satelital.
El magnate Rupert Murdoch y los dos principales directivos de News International, empresa que agrupa sus intereses mediáticos en Reino Unido, fueron citados a declarar en el Parlamento tras el escándalo de espionaje que realizaba su grupo, mientras Scotland Yard lo acusó de mentir y obstruir las investigaciones sobre las escuchas ilegales del diario News of the World.
La crisis se agravó después de que el exprimer ministro, Gordon Brown, acusó al grupo de Murdoch de recurrir a «delincuentes» para acceder ilegalmente a información sobre él y su familia.
Denunció las técnicas «asquerosas» de la prensa de Murdoch y reveló que él y su esposa Sarah lloraron de rabia al saber que The Sun publicaría que su hijo pequeño padece fibrosis quística, a pesar de que ellos querían mantenerlo en privado.
En un nuevo giro inesperado del caso, una comisión parlamentaria pidió la comparecencia de Murdoch, presidente y consejero delegado de News Corp.; su hijo James Murdoch, presidente de su subsidiaria británica News International, y Rebekah Brooks, su directora general, para interrogarlos sobre este creciente escándalo.
«A la luz de las extraordinarias nuevas revelaciones esta semana sobre las escuchas telefónicas, surgieron serias interrogantes sobre las declaraciones prestadas ante el comité por varios testigos en su anterior investigación sobre estándares de prensa, difamación y privacidad», declaró John Whittingdale, presidente del Comité de Cultura, Medios de Comunicación y Deportes.
La comparecencia podría darse «posiblemente» el martes próximo, cuando la comisión se reúne por última vez antes del receso veraniego, señaló.
El caso volvió al primer plano la semana pasada, al revelarse que empleados del News of the World interceptaron en la última década los teléfonos de hasta cuatro mil personas, no sólo de políticos y famosos, sino también de una menor asesinada y familiares de víctimas de crímenes, y atentados terroristas y de soldados muertos en Irak o Afganistán. También pagaron presuntamente a policías a cambio de información.
El domingo se publicó la última edición del diario, un tabloide que pertenece a Murdoch y cuyo cierre se debe al escándalo.
Asimismo, el gobierno británico urgió a Murdoch a renunciar a su intención de asumir pleno control del principal canal de TV satelital del Reino Unido, en medio del creciente escándalo de escuchas ilegales y pago de sobornos que involucra a varios de sus diarios.
Fuente: El Financiero, Internacional, p. 22.
Publicada: 13 de julio e 2011.
