Las vidas de millones de niños y niñas vulnerables están en riesgo porque la mayoría de las naciones del mundo no han reafirmado su compromiso con los derechos del niño, según advirtieron seis importantes organizaciones internacionales en materia de derechos del niño.
Las agencias, representadas por una coalición denominada Joining Forces, expresaron su consternación porque solo un puñado de países se ha comprometido concretamente a promover los derechos de los niños y niñas para conmemorar el 30mo aniversario de la Convención sobre los Derechos del Niño de la ONU el 20 de noviembre.
A la fecha, menos de la mitad de los países adoptaron el compromiso global «Para cada niño, todos los derechos» para redoblar los esfuerzos en defensa de los niños y niñas, en respuesta a la invitación de UNICEF y las Naciones Unidas.
Peor aún, menos de 50 países han presentado compromisos nacionales y casi ninguno de los países que tienen las tasas más altas de pobreza y marginación infantil se han comprometido.
«Hay millones de niños y niñas que se han quedado atrás», sostuvo Meg Gardinier, secretaria general de ChildFund Alliance y presidente de Joining Forces. «Teniendo en cuenta todo lo que hemos logrado desde 1989, su sufrimiento constituye un incumplimiento grave de las promesas realizadas a los niños y niñas hace 30 años. Es indispensable que los estados trabajen con renovado vigor y urgencia para hacer realidad los derechos de todos los niños.»
Las seis agencias instaron a los gobiernos a asumir compromisos respecto de políticas específicas para los niños y niñas o a comprometer mayores inversiones en áreas como educación, salud o protección social.
La Convención sobre los Derechos del Niño de las Naciones Unidas es el tratado internacional de derechos humanos más ampliamente ratificado de la historia. Ha impulsado una inversión sustancial en las áreas de salud, educación y seguridad infantil y la adopción de leyes y políticas que reconocen los derechos de los niños y niñas, particularmente en áreas donde son vulnerables, incluida la explotación laboral, el castigo corporal, el cuidado alternativo y el matrimonio forzado y prematuro.
Sin embargo, la coalición expresó su grave preocupación porque pese a los avances extraordinarios logrados en las últimas tres décadas, la vida de demasiados niños sigue arruinada.
Andrew Morley, presidente y director ejecutivo de World Vision International, afirmó: «Un número impactante de niños y niñas continúa muriendo por causas que pueden prevenirse, y millones más no asisten a la escuela o sufren abusos desgarradores. Se estima que 12 millones de niñas menores de 18 años se casan cada año. Recientemente conocí a una niña de 8 años en el este de África que había sido sometida a la mutilación genital femenina (MGF) y el matrimonio forzado. Le robaron su infancia y arruinaron su futuro. No podemos mantenernos al margen y permitir que esta atrocidad siga sucediendo.»
El informe de Joining Forces: Una Segunda Revolución: 30 años de derechos del niño y la agenda pendiente mostró que los compromisos asumidos hace tres décadas para proteger los derechos de los niños y niñas siguen sin cumplirse para millones de ellos. La violencia todavía afecta a muchísimos niños y niñas. La discriminación por razón de la edad, el género, la discapacidad, la orientación sexual y la religión perjudica a los niños y niñas en todo el mundo.
Los factores clave incluyen la falta de inversión en servicios de importancia fundamental. La mayoría de los países no llegan a invertir el 5-6% del PIB necesario para garantizar la cobertura universal de la atención médica esencial. Y la ayuda extranjera, de la que dependen muchos países de bajos ingresos, es insuficiente en áreas como salud, educación, protección y atención de la infancia.
Otro factor, según el informe, es la falta de datos de calidad. Los gobiernos tienden a basarse en datos que reflejan los promedios nacionales, por lo que resulta difícil identificar las necesidades específicas de los niños y niñas y monitorear el progreso. La recopilación exhaustiva de datos y la desagregación de los datos por género, edad, discapacidad y localidad son cada vez más importantes, ya que las violaciones de derechos afectan de manera desproporcionada a los niños y niñas desfavorecidos.
Las estadísticas existentes muestran que la pobreza sigue siendo el mayor factor determinante de resultados para un niño. Los niños en el 20% de los hogares más pobres tienen un 40% más de probabilidades que el promedio de morir antes de cumplir cinco años. Los niños pequeños en las familias más pobres, así como en áreas rurales y remotas, tienen 2 a 3 veces más probabilidades de sufrir retraso en el crecimiento físico. Asimismo, los niños y niñas en todo el mundo tienen el doble de probabilidades que los adultos de vivir en la pobreza extrema..
Comunicado de Prensa