Los miembros de la familia Sauers, habitantes del suburbio de Seabrok, al sureste de Houston, Texas, pasarán a la posteridad como los primeros usuarios y propietarios del Nissan Leaf, el primer vehículo 100% eléctrico, cero emisiones, de producción masiva, que salió al mercado en diciembre del 2010.
«El Nissan Leaf, más que un producto nuevo, es el inicio de una nueva era de la movilidad sin tubos de escape, sin gasolina. Nuestro objetivo es crear una sociedad cero emisiones, a través de la producción masiva de centenares de miles de vehículos eléctricos alrededor del mundo», dijo Carlos Tavares, presidente del Comité Directivo de las Américas de Nissan, en el lanzamiento oficial del vehículo en el marco de la COP 16 y del foro Green Solutions, ambos eventos celebrados en Cancún, Quintana Roo, México.
El auto es un hermoso sedan, con capacidad para cinco pasajeros. Su diseño es moderno, igual que su tablero multicolor, algunas partes incluso elaboradas de botellas recicladas. El timón es inmaculadamente blanco, al igual que una parte de su tablero. El motor es completamente silencioso, su manejo es suave y responde rápidamente al presionar el acelerador.
El corazón del primer vehículo eléctrico de producción masiva son sus grandes baterías de litio, que no emiten ninguna emisión contaminante. No requiere de ningún tipo de motor de combustión interna.
Con la energía almacenada se calcula que puede rodar 160 kilómetros y el motor eléctrico correspondería a una potencia de 107 caballos de fuerza.
Se carga en la noche, en casa, mientras su dueño duerme, igual que un celular. Pero también se instalaran estaciones de servicio eléctrico en Estados Unidos.
Con «estas características verdes, el Nissan Leaf fue calificado como «El mejor en el segmento de autos medianos» y «El mejor para el medio ambiente» por la Agencia de Protección Ambiental (EPA) de Estados Unidos.
Asimismo, recibió el reconocimiento como el Auto Europeo del 2011, según los ejecutivos de Nissan, una de las más prestigiosas casas automotrices japonesas, y el del Carro Mundial del Año 2011 durante la segunda jomada del Salón Internacional del Automóvil de Nueva York, realizado en Estados Unidos.
«Las corporaciones tenemos la obligación de contribuir tomando iniciativas de alta tecnología, que contribuyan a favor del medio ambiente y de la sociedad en su conjunto», dijo Tavares, en la rueda de prensa con medios mexicanos y extranjeros.
Destacó que una de las actividades estratégicas de la corporación la constituye el Nissan Green Program, un programa que engloba diversas actividades corporativas enfocadas a preservar el medio ambiente, y el Nissan Leaf es prueba real y fehaciente de ello.
En Estados Unidos, explicó el presidente del Comité Directivo de las Américas de Nissan, el vehículo tiene un precio de introducción promedio de US$32.000; sin embargo, habrá un subsidio gubernamental de US$7.500, que podría sumarse a otros subsidios estatales, como California, que ha ofrecido US$5.000 extras. Es decir, un usuario de California terminara comprándolo por US$20.000. En Europa también recibirá un subsidio de unos 5.000 euros.
Para el 2012, con la producción de plantas en Japón, Estados Unidos, Europa y otras, se ha propuesto producir 250.000 Nissan Leaf, e igual número de paquete de baterías litio. La meta de Nissan es convertirse en la marca líder en el sector de vehículos eléctricos. Para el 2020 desea poseer el 10% de la cuota mundial del mercado de vehículos.
En el 2010, tras la crisis financiera mundial, el gigante Nissan salió fortalecido. El señor Tavares informó que se vendieron 4,1 millones de vehículos, cifra superior a los 3,5 millones de autos del alto anterior.
El Nissan Leaf se introducirá en México primero, esperando que se promuevan políticas oficiales de apoyo a estos vehículos cero contaminantes y, posteriormente, vendrían a Centroamérica.
Fuente: Empresas & Negocio, p. 54.
Por: Roberto Fonseca.
Publicada: julio 2011.