En México, 90% de las empresas mexicanas son familiares, las cuales generan más de 70% del PIB nacional y soportan ocho de cada diez empleos formales; sin embargo, su desaparición es constante debido a la falta de un gobierno corporativo y preparar la sucesión.
El tema de la sucesión es el talón de Aquiles. En México solamente tres de cada diez empresas familiares son capaces de consolidarse en segunda generación y, de éstas, sólo 4% llega a una tercera generación.
Mientras que, en lo relacionado a un gobierno corporativo, simplemente no se trata, y se deja a un lado la conformación de mecanismos de comunicación eficaces, como protocolos familiares que no debilitan a la empresa.
De ahí que sólo una de cada diez firmas familiares mexicanas tiene más de 100 años, menos de la tercera parte sobrevive para ser manejada por una segunda generación y tan solo 15% llega a la tercera.
Mientras que hay países donde las empresas familiares tienen gran relevancia, como es España: 56% de los empresarios cuentan ya con protocolos familiares y 23% está en proceso.
Ante dicho impacto, sabemos que la Secretaría de Economía, bajo el mando de Bruno Ferrari, toma cartas en el asunto en pro de desarrollar programas dirigidos a este gremio empresarial, principalmente de capacitación y crédito, a fin de establecer esquemas empresariales más acordes con la tendencia internacional.
Ojalá que sea cierto, de lo contrario, seguiremos viendo un segmento empresarial mexicano debilitado.
Fuente: Excelsior.com.mx
Por: Marielena Vega
Publicada: 7 de noviembre de 2011.
