El Día Internacional de la Mujer es un día para romper sesgos. Un día en el que conmemoramos la lucha de las mujeres que durante siglos han trabajado en favor de un mundo equitativo, en donde el género no sea motivo de discriminación, o pretexto para privar algunos individuos de sus derechos.
Sin embargo, a medida que esta fecha de va popularizando, ha comenzado a perderse el verdadero sentido de la conmemoración. Al carecer de conocimiento acerca de los orígenes y el sentido de esta fecha, decenas de personas felicitan a las mujeres e incluso les hacen llegar obsequios similares a los que les darían el Día del Amor y la Amistad, por ejemplo.
Diversos colectivos y organizaciones feministas han alzado la voz para pedir a los hombres, y también a otras mujeres, que eviten las felicitaciones, los chocolates y las flores. Pero ¿a qué se debe? y ¿qué debemos decir y hacer entonces para conmemorar este día?
¿Qué es el Día de la Mujer?
El Día Internacional de la Mujer es una fecha que se celebra en muchos países del mundo. Cuando las mujeres de todos los continentes, a menudo separadas por fronteras nacionales y diferencias étnicas, lingüísticas, culturales, económicas y políticas, se unen para celebrar su día, pueden contemplar una tradición de no menos de noventa años de lucha en pro de la igualdad, la justicia, la paz y el desarrollo.
Nació de las actividades del movimiento sindical a principios del siglo XX en América del Norte y Europa. La fecha se conmemoró por primera vez en los Estados Unidos el 28 de febrero de 1909, cuando se convocó la huelga de los trabajadores textiles y mujeres del Partido Socialista de los Estados Unidos protestaron también contra las condiciones laborales en Nueva York en 1908. En 1917, las mujeres en Rusia deciden protestar de nuevo, y luchar por «Pan y Paz» en el último domingo de febrero (cayó en un 8 de marzo en el calendario gregoriano), llevando a la adopción del voto femenino en Rusia.
A partir de estos años, el Día Internacional de la Mujer tomó una nueva dimensión global para las mujeres en los países desarrollados y en desarrollo.
¡Es por todo ello que en este día NO se felicita!
Entonces…
Qué si y qué no, para las personas…
¿Qué regalar?
Olvídate de regalar flores, chocolates y artículos similares. No estamos celebrando y las mujeres no quieren obsequios. Lo que se busca, por lo que se sale a marchar en decenas de ciudades es igualdad de derechos.
Así que, si quieres hacer algo para conmemorar el día con las mujeres cercanas a ti, en lugar de regalar flores o chocolates, puedes regalar tu tiempo y energía para realizar actividades que erroneamente delegas en ellas debido a su género. ¡ALERTA ROJA! No las estás ayudando. La idea es reconocer que no por ser mujeres les toca hacerse cargo, por ejemplo, de las labores del hogar.
De preferencia, mantén ese comportamiento todo el día y trata de buscar un reparto equitativo de las labores domésticas y de cuidado. Si eres padre y cuidas a tus hijas e hijos, no ayudas a la madre, ejerces la paternidad.
También puedes dedicar unos minutos a escuchar activamente la historia de violencia de tu pareja, tu hermana, o cualquier otra mujer en tu entorno. Evita juzgarla. Presta atención y descubre qué puedes aprender sobre ella y sobre todas las mujeres a través de su experiencia.
¿Qué decir?
Olvídate de Feliz día de la Mujer y dí hola al Yo te creo.
Ya entrados en eso de regalar tiempo para escuchar historias, ¿qué te parecería cambiar las felicitaciones por palabras de empatía?
Evita juzgar a otras mujeres por su feminismo, tacharlas de radicales, o decir cosas como que ellas «aguantan porque quieren».
Mejor pon a prueba tu empatía y manifiesta a las mujeres tu apoyo y disposición para entender, escuchar y dar soporte.
Noticias. Ningún hombre o mujer está libre de haber cometido actos de seximo. Todas y todos somos resultado de un sistema que se llama patriarcado. De él derivan modelos de amor romántico, roles de género, estereotipos y una larga lista de etcéteras que afectan tanto a mujeres como a hombres.
Así que si eres hombre es muy probable (por no decir seguro) que tengas actitudes o acciones que pueden violentar los derechos de tu pareja en distintas medidas; como los celos, o la sobre protección. Eso no necesariamente te convierte en la peor pareja del mundo, siempre que estés abierto a reconocerlas y aprender a relacionarte distinto.
