Las autoridades de la ciudad de EU pretenden controlar la fiesta que convoca a denunciar el consumismo navideño disfrazado de Papá Noel
El Departamento de policía de Nueva York ha prohibido a los bares de la ciudad servir alcohol a cualquier persona disfrazada de Santa Claus, en el contexto del SantaCon, una tradición que invita a los neoyorquinos desde hace una década a vestirse como el ícono navideño cómo método de protesta contra el afán consumista.
La decisión de la policía se dio tras el aumento de participantes en la convocatoria, que se celebrará el 14 de diciembre. "Han aumentado tanto que invaden las aceras y los espacios públicos", dijo el teniente John Cocchi de la policía neoyorquina en una carta remitida a los propietarios de bares comprendidos entre las zonas de Chelsea y Columbus Circle.
El SantaCon, que se celebra en 303 ciudades del 41 países del mundo, fue pensado originalmente para denunciar el espíritu comercial de las Navidades, que se ha ido convirtiendo en un evento "caritativo, no comercial y no político", según señala la página de la convocatoria.
La policía de Nueva York se opone a una fiesta masiva que lleva consigo "miles de fiesteros deambulando intoxicados por las calles, orinando, ensuciando, vomitando y causando actos vandálicos", algo que, según Cocchi, "no será tolerado" en los distintos vecindarios.
Los organizadores del evento defendieron el carácter caritativo de la fiesta, en la que se propone a los participantes una donación de 10 dólares para el banco de alimentos de la ciudad, y recordaron el código de conducta que se pide a los participantes.
"Santa siembra la alegría, no el terror, ni vómitos, ni basura. Santa es bueno con los niños, les hace reír, no llorar. Santa respeta la ciudad, no orina en las calles, no se pelea, no bloquea las calles, no se sube a los coches o hace pintadas en la propiedad ajena", reza el Código de Santa, publicado en el sitio web de SantaCon. La organización añade otras cuatro reglas básicas: "No molestar a los niños, no molestar a los policías, no molestar al personal de los bares y no molestar a la ciudad de Nueva York".
Algunos bares ya respondieron que seguirán las indicaciones de la policía y no servirán alcohol a ningún Santa que se acerque a sus locales, mientras las autoridades insisten en que cualquier beneficio por las ventas de ese día será largamente superado por los perjuicios del impacto a largo plazo.
El primer SantaCon se celebró en San Francisco en 1994 y fue patrocinado por The San Francisco Cacophony Society.
Fuente: CNN.