Por: Fabián Muro, ex-secretario del Comité para el Fomento y Participación de las Organizaciones de la Sociedad Civil en el Estado de Jalisco
Tras varios años de incidencia y de movilización ciudadana, el 21 de julio del 2021, el Congreso de Nuevo León aprobó la Ley de Fomento de la Sociedad Civil Organizada en el Estado.
Era octubre del 2019, cuando por primera vez contacté a Sandrine Molinard; en esa ocasión me dijo textualmente: “estamos intentando tener una ley de fomento aquí”.
El Estado de Nuevo León en materia de fomento a Organizaciones de la Sociedad Civil, no comienza de cero; el Estado ya invierte en las organizaciones no lucrativas alrededor de 200 millones de pesos al año y sus apoyos permiten el financiamiento al personal operativo, asunto satanizado en otros estados. Además, cuentan con una gran apuesta al sector no lucrativo desde las empresas y diversas instituciones, por medio del Consejo Cívico, no sólo de vinculación sino también de fuerte financiamiento privado.
“La ley de Fomento a las Organizaciones civiles en NL es un logro de su sociedad civil. Especial reconocimiento a por su innovación y tenacidad a Sandrine Molinard y al Consejo Cívico de Nuevo León y a todas las organizaciones que nunca se rindieron” comentó Miguel de la Vega de UNIDOSC.
Entre los principales logros, desde la movilización e incidencia de las Organizaciones locales y el Consejo Cívico, se destacan:
- El reconocimiento de los derechos y obligaciones de las Organizaciones de la Sociedad Civil, agrupaciones y redes.
- Se crea el consejo ciudadano de Fomento, voz de las organizaciones en la agenda pública.
- Creación del Comité de vinculación y el Comité Técnico de Fomento.
- Se crea el Registro Único Estatal de las Organizaciones de la Sociedad Civil.
“El que las entidades estén trabajando en sus leyes locales de fomento es una gran noticia para las organizaciones. En el caso de Nuevo León cuentan con un programa de 200 millones y con esta ley se da mayor certeza a las OSC, pensando el Fomento más allá de lo económico y estableciendo órganos de participación y un registro para conocer más sobre las organizaciones a nivel local” comentó Pablo Armando González Ulloa Aguirre, investigador de la UNAM y especialista en la materia.
Mucho por hacer desde lo local, desde los estados, en materia de fomento y participación de las Organizaciones de la Sociedad Civil; por lo pronto hoy celebremos el logro de la incidencia en Nuevo León.
Parece que hay una máxima que prevalece: las leyes de fomento a las OSC, quien las promueve no son los congresos, ni los Gobiernos; son las mismas Organizaciones de la Sociedad Civil.
