Ennesys, una compañia parisina de sistemas energéticos, junto con OriginOil, una recolectora de algas con base en Estados Unidos, acaban de desvelar su nuevo proyecto urbano en La Defensa, cerca de Paris. El revolucionario sistema produce energía a partir de algas presentes en las aguas residuales, al mismo tiempo que filtra estas aguas para su uso como “aguas grises”.
“Las algas son el futuro de los combustibles limpios y baratos”, dice Pierre Tauzinat, CEO de Ennesys. Este sistema de vanguardia cosecha las algas en fotobiorreactores hechos de policarbonato utilizando solo aguas residuales, luz y CO2. Estos paneles recolectores de algas son montados en la fachada del edificio y poseen el beneficio también de actuar como sistema de aislamiento, manteniendo fuera el calor del verano y el frío del invierno.
Una vez que las algas se han desarrollado se cosechan utilizando “OriginOil’s Algae Appliance” para ser procesadas como biomasa, que posee el mismo potencial energético del carbón y se utiliza para ejecutar los sistemas del edificio. Debido a que el proceso no utiliza productos químicos, el agua extraída puede ser utilizada de nuevo en el proceso y, finalmente, cuando se hayan agotado por completo los nitratos, se puede utilizar como “aguas grises” para los inodoros.
Francia ha adoptado una estricta política medioambiental llamada RT2020 que llama a un 20% de reducción del consumo de energía y el crecimiento del 20% del uso de energías renovables para el año 2020. Para alcanzar estos objetivos Francia necesita que sus edificios generen más energía de la que utilizan y procesen las aguas residuales en lugar de desecharlas al sistema cloacal municipal. Riggs Eckleberry, el CEO de OriginOil, cree que este nuevo sistema en colaboración con Ennesys es la respuesta a estas nuevas regulaciones, declarando que “el alga es la solución perfecta para ambos casos, creando energía renovable y limpiando aguas residuales.”
Fuente: Quenergia
