El aumento y la fijación del IEPS a las gasolinas y el diesel ha beneficiado los ingresos fiscales, pero es necesario incrementar también los gravámenes en combustibles usados en otros sectores, como el industrial, recomendó la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE).
“Los incrementos en el impuesto sobre el carbono son necesarios especialmente en los sectores no relacionados con el transporte”, agrega el organismo en el último estudio económico sobre México.
La OCDE argumenta que la contaminación de los combustibles para automotores son sólo un tercio del total de las emisiones de carbono en México, por lo que se debe incrementar el gravamen a otros combustibles usados en procesos industriales, como el gas natural.
“Si se aumenta la tasa impositiva y se amplía la base impositiva (para incluir el gas natural), el impuesto sobre el carbono tiene el potencial de dar cuenta de una proporción significativamente mayor de los ingresos fiscales”, agrega el organismo encabezado por José Ángel Gurría.
La OCDE dice que México tiene un impuesto al carbono mucho más bajo que los otros países miembros. Mientras en el país cada tonelada de dióxido de carbono tiene un impuesto de 1.15 euros, el promedio del organismo es de 30 euros por cada tonelada.
Estados Unidos exporta cada día 3 millones de pies cúbicos de gas a México, casi 60 por ciento de su consumo total. En los últimos meses, la Comisión Federal de Electricidad (CFE) ha aumentado las tarifas para uso industrial y comercial debido al incremento de los precios del petróleo y la depreciación del peso frente al dólar.
En su visita a México, José Ángel Gurría dijo que la liberación de los precios dela gasolina y diesel debió hacerse mucho antes y subsidiar los combustibles fósiles era “una mala asignación de los recursos presupuestales.”
Más inversión en infraestructura
En el documento, la OCDE también señaló que el país puede consolidar mayor crecimiento e inclusión si reorienta su gasto público hacia infraestructura, capacitación, salud y reducción de la pobreza.
El rezago en infraestructura se puede ver en la poca capacidad de refinación de petróleo en México. La OCDE lo ilustra en esta gráfica.
El organismo dirigido por Gurría, quien fue secretario de Hacienda en el gobierno de Ernesto Zedillo, también recomienda aumentar el gasto social en programas para erradicar la pobreza, como PROSPERA.
En 2017, casi el 50 por ciento del Presupuesto de Egresos estará destinado a desarrollo social, mientras que sólo el 22 por ciento será para desarrollo económico, según un estudio del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP).
Este año habrá elecciones en entidades clave para el gobernante Partido Revolucionario Institucional (PRI), como el Estado de México y Coahuila y en 2018 son las elecciones presidenciales.
Fuente: AltoNivel
