En entrevista, el director General de OHL México, Sergio Hidalgo Monroy Portillo, ratifica el compromiso con nuestro país de este grupo internacional de concesiones y operación de infraestructura de transporte de origen español, que en fechas recientes ha vendido parcialmente su participación en algunas de las obras concesionadas.
“Son unos 7,500 millones de pesos que estamos por invertir en 2017, pero con la mira de lograr un proyecto adicional para lo que resta del año”
“Hemos apostado por México y le queremos seguir apostando, una vez que cerremos la venta del Circuito Exterior Mexiquense, en el que mantenemos el 51% de participación, tendremos la capacidad financiera para invertir en uno o dos proyectos más”, asegura.
De acuerdo con Monroy Portillo, los recursos obtenidos por la comercialización del Circuito Exterior Mexiquense generarán un crecimiento de la compañía mexicana, en donde se llegó a sustituir
la inversión pública en el desarrollo de infraestructura y proyectos carreteros.
Los accionistas mayoritarios del Grupo OHL en España han entendido que México es un mercado propicio para hacer negocios en la concesión de carreteras y vialidades urbanas y por ello estamos
comprometidos a seguir invirtiendo los recursos que generemos de los ingresos, cuenta el directivo.
“Son unos 7,500 millones de pesos que estamos por invertir en 2017, pero con la mira de lograr un proyecto adicional para lo que resta del año”.
OHL México, que inició sus actividades en territorio mexicano en 2002, ha cumplido en tiempo y forma con los compromisos adquiridos en cada proyecto en el que ha participado, a pesar de las
desafiantes circunstancias económicas que ha atravesado el mundo y el país.
“Este año representa muchos retos en el que se requieren hacer ajustes presupuestales. Sin embargo, para OHL México esta situación representa una oportunidad de negocio y de crecimiento.
Queremos seguir invirtiendo y sumando a la inversión del gobierno para sacar adelante distintos proyectos”, manifiesta el directivo.
La primera obra de OHL México fue el Circuito Exterior Mexiquense, un proyecto que tardó más de 10 años en el desarrollo y en el que se invirtieron 24 mil millones de pesos. Posteriormente vino la intervención en la autopista Amozoc-Perote y el Viaducto Bicentenario, que va desde el Toreo a Cuautitlán Izcalli. Ni la crisis económica mundial de 2008 y 2009 detuvo los proyectos de la compañía, ya que “con capital propio financiamos todo el desarrollo y logramos financiar hasta el final de la construcción de Viaducto”, destaca el directivo.Después se construyeron las autopistas urbanas de la Ciudad de México, especialmente la Urbana Norte, que va del Toreo hasta San Antonio, y la Supervía Poetas.
El Puente de los Poetas, una concesión donde también participa COPRI, ha dado la mayor satisfacción a todos los usuarios y cambió la vida a mucha gente al llevarla del sur de la Ciudad de México hasta Santa Fe y viceversa, ahorrando tiempo y eficientando su productividad.
“En todos estos proyectos donde nos comprometimos, comenzamos con dificultades y los terminamos en tiempo y logramos entregar a los gobiernos de todos los partidos políticos”, expresa Sergio Hidalgo.
Al respecto, señala el directivo que las dos autopistas urbanas de la Ciudad de México se levantaron durante gobiernos emanados del PRD; el Viaducto Bicentenario y Circuito Exterior Mexiquense se construyeron bajo la administración del PRI, y la carretera Amozoc—Perote y el Aeropuerto Internacional de Toluca fueron obras construidas cuando gobernaba el PAN.
Durante la administración del PAN se levantó un Segundo Piso en Puebla, el cual fue inaugurado apenas hace 4 meses y “estamos generando grandes soluciones de movilidad en toda esa zona en una asociación estratégica con Pinfra”.
En este proyecto, OHL México destinó 5 mil millones de pesos para financiarla “cerramos y terminamos el proyecto con capital propio y en el tiempo pactado”, asegura.
Además, se tiene actualmente un proyecto en desarrollo con el gobierno del PRI del Estado de México que es la autopista Atizapán- Atlacomulco, una inversión de 10 mil millones de pesos, cuya construcción llevará dos años y se terminará en el verano de 2018.
Monroy Portillo añade que una de las prioridades para OHL México en este año es cumplir con dicho compromisoya que “el modelo de negocio que seguimos nos ha permitido crecer poco a poco y una vez que están maduros los proyectos podemos vender una parte minoritaria de nuestras concesiones. Queremos fortalecer nuestra operación, ofrecer un mejor servicio y generar valor”.
Hace dos años, se vendió 24% de las acciones del Circuito Exterior Mexiquense a IFMGlobal InfrastructureFund (IFM), un fondo especializado en la administración y operación de infraestructura a nivel global.
“Recientemente acabamos de anunciar la venta de otro porcentaje del Circuito Exterior Mexiquense para llevar la tenencia de IFM hasta un 49% en su participación accionaria. Todavía no concluimos la operación”. Con ello afirma, “tendremos recursos nuevos para invertir en nuevos proyectos”.
Actualmente OHL México estudia una serie de proyectos y soluciones de movilidad para los distintos gobiernos con el fin de participar en las licitaciones.
“Nosotros sentimos que hay todavía opciones que hacen falta para atender y solucionar la demanda de movilidad que hay en el Valle de México, lo cual nos dará posibilidades de crecimiento”, agrega el directivo.
También, hay posibilidades para detonar proyectos de transporte en Guadalajara y Monterrey:
“Sin duda, nos interesan las grandes urbes, pero en el Valle de México hay todavía una gran necesidad de movilidad y si logramos detectar los proyectos y nos podemos concentrar en desarrollar aún más esta zona urbana, seguiremos creciendo”, concluye Sergio Hidalgo.
Fuente: Milenio