Más de un cuarto de millón de niños cada año nacen infectados con el virus del sida, pero a muy pocos de ellos se les hacen pruebas de manera inmediata para poder para recibir el tratamiento que les prolongue la vida, ha advertido por la ONU.
Por ello, el director ejecutivo de ONUSIDA, Michele Sidibé, ha hecho un llamamiento a los equipos de diagnóstico para mejorar la detección en bebés del Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH ) que causa el sida que, puede eludirse por su precio que aun se considera alto (entre los 25 y los 50 dólares).
Los niños son las víctimas «olvidadas» de la epidemia del sida, a pesar de que el año pasado 260.000 bebés nacieron con la enfermedad, sobre todo en el África subsahariana, ha señalado. «Independientemente del tamaño del mercado es necesario para asegurarse de que los diagnósticos son disponibles para los niños», ha apuntado en una conferencia de prensa en Ginebra, en vísperas del Día Mundial del Sida, que se celebrará el próximo 1 de diciembre.
«Hemos hecho muchos progresos durante los últimos 2-3 años en términos de tratamiento, en cuanto a los medicamentos, en términos de asegurarse de que las moléculas están más bien dirigidos a los niños. Pero donde estamos fallando es en hacer diagnósticos tempranos», ha añadido. Laboratorios Abbott y la farmacéutica suiza Roche se encuentran entre los principales fabricantes de diagnósticos de VIH, han apuntado altos funcionarios del ONUSIDA.
Unos 3,3 millones de niños menores de 15 años tienen el VIH, pero sólo 1,9 millones de ellos requieren tratamiento hoy en día, según la agencia con sede en Ginebra. Menos de 650.000 o el 34 por ciento de los 1,9 millones recibieron medicamentos antirretrovirales contra el sida en 2012, con un aumento del 14 por ciento respecto al año anterior.*Unos 14 millones de adultos que viven con VIH necesitan tratamiento, y 9 millones de ellos o el 64 por ciento lo están recibiendo, una cobertura mucho mayor que para los niños.
ONUSIDA ha identificado 22 países prioritarios para detener las infecciones en los niños, 21 de ellos en África subsahariana, donde viven 90 por ciento de las mujeres que tienen VIH. El otro es la India.
En tres de estos países prioritarios –Chad, República Democrática del Congo y Malawi– menos del 5 por ciento de los niños en situación de riesgo son la prueba del VIH al nacer, según los datos de ONUSIDA.
«En los países prioritarios, sólo 3 de cada 10 niños reciben tratamiento para el VIH. Hemos visto un gran compromiso político y resultados para reducir la transmisión de madre a hijo, pero estamos fallando a los niños que se infectan», ha reconocido Sidibe, que es de Mali.
Todos los niños menores de cinco años que dan positivo al virus deben recibir tratamiento, ha explicado Mahesh Mahalingam, director de ONUSIDA para el plan mundial para detener las nuevas infecciones en los niños.
Las pruebas de PCR actuales son capaces de detectar el virus en un bebé hasta después de la edad de seis semanas, y requerir el envío de una muestra de sangre a un laboratorio especializado, ha reconocido. «Lo que se busca son pruebas más fáciles que se puedan administrar antes, lo que ayudará a detectar el virus y comenzar el tratamiento más rápido. Recomendamos que tan pronto se sepa que el niño es VIH positivo se inicie en el tratamiento con anti-retrovirales», ha señalado Mahalingam a Reuters.
«Cuanto antes podamos diagnosticar antes podremos tratarles, lo que aumentará posibilidades de supervivencia del niño y permitir que lleguen a convertirse en adultos. Si empezamos muy temprano tienen la misma oportunidad de vivir como cualquier otro niño», ha asegurado.
Fuente: Europa Press.