Mientras las economías luchan en todo el mundo para recuperar el sentido de la estabilidad, las empresas siguen tambaleándose por los efectos devastadores de la pandemia por COVID-19.
Muchas compañías se han visto obligadas a cerrar puertas, reducir su tamaño o revisar apresuradamente sus estrategias organizacionales. Pero a pesar de enfrentarse a un futuro incierto, una reciente encuesta de la Sociedad de Gestión de Recursos Humanos ha revelado un fuerte optimismo entre las pequeñas empresas para superar la tormenta COVID-19.
Tal optimismo se basa en la flexibilidad, la adaptabilidad y la capacidad de ajustarse a los cambios continuos. Muchas pequeñas empresas han reconocido esto. El ajuste podría incluir tomar una decisión tan simple como iniciar su propio sitio web… o adaptar su modelo de negocio a una brecha que surja en el mercado y que actualmente esté siendo definida por COVID-19.
Esta misma encuesta reporta que hasta el 52% de los pequeños negocios muestran optimismo y creen que volverán a la rentabilidad anterior al COVID-19 en seis meses. Si tu eres un pequeño empresario que dirige su negocio cruzando los embates de COVID-19, hay muchas razones para ser optimista sobre la supervivencia a la pandemia.
Razones para ser optimista
Innovación
La encuesta informa que las pequeñas empresas operan bajo la premisa de que con la adversidad viene la oportunidad, estas se encuentran recurriendo a la innovación para mantenerse a flote. Con más del 43% de ellas cambiando su modelo de negocio para incluir nuevos productos o servicios, tu empresa haría bien al seguir pasos similares.
La innovación no sólo se aplica a los productos y servicios que ofrece la empresa. Las estrategias de comercialización han tenido que ser ajustadas para cumplir con los requisitos de un nuevo modelo de negocio.
Mientras que antes las empresas dependían del contacto directo con sus clientes, ahora utilizan el marketing digital.
Al enfrentarse a las limitaciones, las pequeñas empresas no han tenido más remedio que encontrar formas innovadoras de sacar a la luz su negocio. Como resultado, la forma de trabajar tendrá que cambiar.
Flexibilidad con los empleados
Los resultados de la encuesta destacaron que las pequeñas empresas son flexibles en su forma de operar. Más del 31% ofrece opciones de trabajo a distancia de tiempo completo a sus empleados. Su propia empresa podría beneficiarse de la reducción de los costes de personal al permitir que sus empleados trabajen desde casa.
Este mismo enfoque flexible podría aplicarse a las necesidades de cuidado de los hijos de sus empleados. Los gobiernos han impuesto regulaciones más estrictas para las escuelas y centros de cuidado infantil como respuesta a COVID-19. Algunos padres no quieren enviar a sus hijos a la escuela, sino que prefieren educarlos en casa. Muchas pequeñas empresas están revisando sus políticas de recursos humanos para incluir estas preocupaciones. Los empleados podrían beneficiarse de un horario de trabajo flexible.
Mejorar la capacitación de los empleados
A medida que cambie el modelo de negocio tradicional, también lo harán las necesidades de capacitación de los empleados.
Más del 22% de las pequeñas empresas encuestadas han indicado su respuesta al cambio pidiendo a los empleados que mejoren sus habilidades.
Esto se ha hecho para dotar a los empleados de nuevas habilidades para apoyar los cambios que se están haciendo en la empresa.
Como resultado de COVID-19, su empresa puede requerir el revisar la forma en que se hacen las cosas, y esto incluye a sus trabajadores. Toda empresa quiere ser capaz de mantener a sus empleados a bordo. Un recorte de personal es una opción que sólo debe ser considerada como un último recurso. Al crear nuevas habilidades y desarrollar nuevos enfoques para la forma de operar, las pequeñas empresas mantienen a sus empleados.
Preocupaciones de seguridad
Este optimismo no niega las preocupaciones de los empresarios en cuanto a la salud y la seguridad de sus empleados. Es necesario tomar medidas estrictas antes de que cualquier empleado pueda operar desde el lugar de trabajo. Esta responsabilidad puede ser una perspectiva desalentadora para muchas pequeñas empresas.
Si bien las respuestas a la encuesta indicaron que más del 53% de los propietarios estaban preocupados por la posibilidad de tener que hacer frente a demandas judiciales y al aumento de las obligaciones, esto no les impidió ser optimistas.
Apoyo de la comunidad
Parte del optimismo que sienten las pequeñas empresas encuestadas ha sido alimentado por la fuerte aceptación de las comunidades locales. En un esfuerzo por mantener a flote las pequeñas empresas, muchos miembros de la comunidad están apoyando a sus empresas locales.
Con una creciente conciencia de las pequeñas empresas que luchan por seguir funcionando durante COVID-19, las comunidades locales están encontrando formas de apoyar. Muchas empresas han informado que los miembros de la comunidad local las están promoviendo abiertamente en Facebook e Instagram sin que se les pida que lo hagan.
Al reconocer a su comunidad local y hacer coincidir sus necesidades con lo que usted puede ofrecer, su negocio podría crecer exponencialmente. Ajustar su negocio a estas necesidades podría ser la clave para que su empresa sobreviva a la pandemia COVID-19 con pérdidas mínimas para usted y sus empleados.
Avanzando
Al ser flexibles, adaptables y abiertos a los ajustes, las pequeñas empresas son optimistas en cuanto al avance. Más del 75% de las pequeñas empresas encuestadas indicaron que confían en tener éxito en caso de que surjan retos similares en el futuro.
Viendo la COVID-19 con optimismo, tu pequeña empresa podría prosperar a pesar de los cambios que se imponen. La innovación, la creatividad y la voluntad de cambiar la forma en que hace negocios te permitirán superar esta tormenta.