En el corazón de la Ciudad de México, la Plaza México, considerada el ruedo más grande del mundo, ha sido testigo de un enfrentamiento entre la tradición y la creciente conciencia sobre el bienestar animal. Lo cual culminó en una decisión oficial con la que suspenden corridas de toros en la Alcaldía Benito Juárez, por lo menos, temporalmente.
La medida provino de un amparo presentado por la organización Todas y Todos por Amor a los Toros, contra la Ley para la Celebración de Espectáculos Públicos del Distrito Federal, la cual permite la tauromaquia. Pero ¿se logrará una suspensión permanente e incluso una prohibición o nuevamente se reunirán familias enteras alrededor de la crueldad animal?
¿Por qué suspenden las corridas de toros?
Por orden de la jueza federal Sandra de Jesús Zúñiga, se suspenden las corridas de toros en la Plaza México, lo cual ha llevado a muchos a cuestionarse sobre el futuro de esta arraigada tradición en la Ciudad de México. El contexto de esta medida legal se remonta a mayo de 2022, cuando la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) aprobó una suspensión previa que impedía la realización de eventos taurinos en el recinto.
La organización Justa Justicia había obtenido dicha suspensión de forma indefinida, argumentando que las leyes federales prohíben el maltrato animal y que las prácticas en las corridas de toros violan el derecho a un medio ambiente sano. Sin embargo, en diciembre de 2023, la SCJN desechó el amparo, permitiendo así el regreso de las corridas de toros a la Plaza México.
Sin embargo, esto no desalentó la lucha contra la tauromaquia, por lo que se presentó un nuevo amparo por parte de la organización Todas y Todos por Amor a los Toros contra la Ley para la Celebración de Espectáculos Públicos del Distrito Federal. Con lo cual, se logró una suspensión provisional el 31 de enero de 2024.
La audiencia programada para el 7 de febrero determinará si se concede una suspensión definitiva, mientras que el 16 de marzo se tomará la decisión sobre el amparo en sí. Este proceso legal deja abierta la interrogante sobre la permanencia o no de la suspensión de las corridas de toros en la Plaza México.
La crueldad de la tauromaquia
La tauromaquia ha sido durante mucho tiempo objeto de debate en la sociedad mexicana, suscitando opiniones apasionadas y divergentes. Ahora, con la noticia de que se suspenden las corridas de toros en la Plaza México, se ha avivado la discusión sobre la ética de esta práctica y ha puesto de manifiesto la creciente oposición a estos «espectáculos» en el país.
Al respecto, la organización PETA (Personas por el Trato Ético de los Animales) ha señalado que se masacra a más de 40 mil toros cada año en plazas en todo el mundo. Desde el momento en que ingresan, estos animales pierden toda oportunidad de defensa. Son sometidos a prácticas que van desde debilitamientos con golpes hasta el afeitado de sus cuernos y la aplicación de vaselina en sus ojos para perjudicar su capacidad de juzgar la distancia.
Pero eso no es todo, en una típica corrida de toros española, el toro enfrenta un proceso cruel desde el momento en que entra a la arena. Los picadores, montados en caballos con los ojos vendados, le disparan lanzas hacia los músculos del lomo y el cuello, dificultándole al toro subir la cabeza y defenderse.
Posteriormente, los banderilleros lanzan banderillas sobre el lomo del animal, debilitado por la pérdida de sangre. Finalmente, el matador intenta atacar al toro con su estoque, buscando cortar la espina dorsal del animal. Este proceso a menudo resulta en la mutilación del toro y requiere la intervención de un ejecutor para darle la estocada final.
¿Qué opina la gente?
La industria turística, uno de los mayores partidarios de las corridas de toros, a menudo retrata estos espectáculos como festivos y atractivos, sin revelar la brutalidad que subyace. Sin embargo, muchos visitantes extranjeros, después de presenciar una corrida, salen asqueados y disgustados por la crueldad del espectáculo.
Sin embargo, no solo hay rechazo entre los turistas, ya que las encuestas realizadas en España revelan que la opinión pública está dividida sobre si las corridas de toros son consideradas cultura o maltrato. Un 18% las percibe como cultura, mientras que un 40% las considera maltrato, y un 37% considera que a pesar de ser cultura también es maltrato.
En el contexto mexicano, según una encuesta realizada en 2022, hay una postura mayoritariamente contraria a las corridas de toros. Un 61.4% de los encuestados está en contra, mientras que solo un 19.1% está a favor. Estos resultados indican un cambio en la percepción pública, sugiriendo que una parte significativa de la sociedad mexicana rechaza la tauromaquia y respalda las medidas que suspenden las corridas de toros.
¿Deberíamos levantar la suspensión a las corridas de toros?
La controversia en torno a si suspenden o no las corridas de toros no se limita únicamente a debates legales y éticos, sino que también plantea reflexiones más amplias sobre la relación entre el entretenimiento humano y el trato hacia los animales.
Por ello, se cuestiona si la preservación de tradiciones culturales justifica el sufrimiento de animales. En un contexto global, diversas ciudades y regiones han tomado medidas para prohibir o restringir las corridas de toros, reconociendo la necesidad de evolucionar hacia formas de entretenimiento que no comprometan el bienestar de los animales.
En México, la suspensión temporal de las corridas de toros en la Plaza México y la prohibición en varios estados del país, como Sonora, Guerrero, Coahuila, Quintana Roo y Sinaloa, reflejan una transformación en la percepción social de estos espectáculos. Además, la presión de organizaciones defensoras de los derechos de los animales ha contribuido a visibilizar la crueldad detrás de estos eventos.
Así, las reflexiones en torno a los espectáculos que implican el maltrato animal nos invitan a repensar nuestras tradiciones culturales y formas de entretenimiento. La sociedad mexicana, al igual que otras comunidades a nivel mundial, enfrenta el desafío de equilibrar el respeto por las raíces culturales con la evolución hacia prácticas más éticas y compasivas.
La próxima audiencia programada y las decisiones judiciales que se tomen al respecto podrían tener un impacto significativo en el futuro de las corridas de toros en México. Quizá lleguemos a ver la noticia de que se suspenden las corridas de toros definitivamente.
Increíble que estando ya en más de una veintena de años del siglo XXI, haya gente que disfrute del maltrato animal. Lástima