Tras la separación de niños de sus familias desde que el gobierno de Donald Trump implementó la “Tolerancia cero” hacia los migrantes, la Organización de las Naciones Unidas presentó recientemente el Pacto Mundial para la Migración Segura, Ordenada y Regular, un acuerdo alcanzado por los gobiernos de todo el mundo excepto Estados Unidos.
Se trata del primer paso para tratar de gestionar los flujos migratorios de forma integral y a nivel global.
Por ello, Antonio Guterres, secretario general de la ONU dijo que el entendimiento de los países sobre la migración es un fenómeno internacional que necesita la cooperación de diversas naciones para ampliar los beneficios generales.
El pacto se estructura en torno a 23 grandes objetivos. Entre esas metas, hay algunas genéricas como la cooperación para abordar las causas que motivan la migración o mejorar las vías de migración legal. Pero también hay compromisos concretos, como medidas contra la trata y el tráfico de personas, evitar la separación de las familias, usar la detención de migrantes sólo como última opción o reconocer el derecho de los migrantes irregulares a recibir salud y educación en sus países de destino.
Por su parte, Juan José Gómez Camacho, embajador de México ante la ONU dijo que «no es jurídicamente vinculante, pero es poderosamente político. No tenemos ninguna duda de que todos los Estados miembros se van a sentir políticamente comprometidos por él y en la práctica serán totalmente beneficiados».
El entendimiento de los países sobre la migración es un fenómeno internacional que necesita la cooperación de diversas naciones: Antonio Guterres, secretario de la ONU.
Las negociaciones sobre el Pacto Mundial para la Migración Segura, Ordenada y Regular han sido satisfactorias, por ello la directora de UNICEF, Henrietta Fore, se ha mostrado alegre porque supone «un gran logro para los niños».
«El pacto debería ayudar a gestionar mejor la respuesta global a la migración internacional y abordar los desafíos que enfrentan los casi 50 millones de niños desarraigados en todo el mundo».
En dicho pacto se defiende el interés de los niños y además enfatiza la importancia de la unidad familiar. Por ello, según Fore, debería ayudar a dotar a los Estados miembros con herramientas para prevenir la muerte de niños, protegerlos del abuso y la explotación, evitar el trauma de la separación familiar, la detención o expulsión forzada y optimizar los beneficios de la migración para los niños.
Por ello, UNICEF espera que se adopte de manera formal el Pacto Mundial en Marrakech el próximo diciembre y muestra su disposición a trabajar junto con los Estados miembros, las agencias de las Naciones Unidas, las autoridades locales, la sociedad civil y las organizaciones religiosas para convertirlo en una práctica para los niños desarraigados.
Las negociaciones sobre el Pacto Mundial para la Migración Segura, Ordenada y Regular han sido satisfactorias, por ello la directora de UNICEF, Henrietta Fore, se ha mostrado alegre.
Para la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) de México, «la elaboración del Pacto Mundial para una Migración Segura, Ordenada y Regular es un logro internacional».
«El Pacto Mundial beneficiará a las personas migrantes ya que se toma en consideración las diferentes prioridades y posiciones expresadas por los Estados miembros de la ONU y otros actores a lo largo del proceso, así como el entendimiento común sobre la forma de abordar de manera efectiva la migración internacional».