Siempre y cuando se consuman de manera responsable, una de nuestras botanas favoritas seguirán siendo las papas fritas…
Y probablemente continuarán liderando esta posición cuando sepas que por medio de la agricultura sustentable, su producción será mucho más saludable.
Agricultura sustentable
Dentro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), se integra la Producción y Consumo Responsable, una meta que empresas como PepsiCo han integrado a su agenda en materia de responsabilidad social corporativa.
Este objetivo tiene como propósito lograr que para 2030 exista un crecimiento ecónomico que a su vez impulse el desarrollo sostenible y mejore la huella ambiental por medio de estrategias de producción, consumo de bienes y recursos más sostenibles.
PepsiCo comprende la importancia de impulsar el cumplimiento de este objetivo y reconoce que la agricultura es el principal consumidor de agua en el mundo y el riego, representando casi el 70% de toda el agua disponible para el consumo humano.
Gracias a ella pueden cultivar la papa, la cual contiene una diversidad génetica por sus variedades ancenstrales. Este ingrediente, también es importante para PepsiCo, así que la marca se esta asegurando de cuidar de ella y su calidad.
Papitas sustentables
De acuerdo con la consultora Markestrat, en asociación con la Confederación de Agricultura y Ganadería de Brasil (CNA), más de 300 millones de toneladas de papas se cosechan cada año en el mundo.
De esto, unas 3.5 millones de toneladas provienen de Brasil, lo que representa alrededor de US $ 1.6 mil millones.
Esta demanda alta de papas para uso industrial impulsó que PepsiCo creara en asociación con Bayer, el programa «Agro Batata», que busca invertir en actividades de capacitación para los agricultores y así ayudarlos a cumplir con los requisitos y objetivos que se establecieron para mejorar la calidad del producto.
El éxito de este programa se basará en contrato anuales que PepsiCo realizó con 40 productores brasileños:
“¿Por qué invertimos en capacitaciones? Bueno …, entre otras cosas, porque entendemos el papel vital que desempeñan los granjeros con respecto a la seguridad alimentaria, también es fundamental para el éxito de nuestro negocio, y el consumidor exige cada vez más productos de calidad y responsabilidad ambiental”, comentó el equipo responsable de esta alianza.
Los agricultores se encuentran principalmente en los estados de Minas Gerais, Paraná, São Paulo y Goiás y utilizan exclusivamente variedades que producen papas que pesan en promedio aproximadamente 140 gramos y tienen un diámetro de 7 centímetros
El secreto esta en el crunch
La marca también se concentró en mejorar la receta de las papas para hacerlas más crujientes. PepsiCo señala que los consumidores son amantes de las chips crujientes. Aunque no es lo más importante en lo que se enfocaron.
PepsiCo y Bayer saben que existen variables y riesgos, como plagas y enfermedades, que pueden dañar el cultivo de la papa antes de que ella pueda llegar a nuestra mesa.
Así que el trabajo de “Agro Batata” incluye, capacitación en gestión agrícola y seguridad alimentaria, así como apoyo en torno a la mecanización y la automatización de procesos.
“Desde que comenzó el programa en Brasil, los agricultores socios ya han duplicado la productividad, obteniendo papas con mejor calidad y logrando un uso más racional de los recursos naturales y los insumos agrícolas”, comparte la alianza.
Hasta el momento “Agro Batata”, es la iniciativa global con más relevancia de PepsiCo, incluso por encima del Programa de Agricultura Sostenible (SFP),que se realizó en 40 países y llega a más de 15,000 agricultores, aproximadamente 100 de estos agricultores están en Brasil.
Siguentes objetivos
La marca compartió que para 2020, el objetivo será que el 100% de las materias primas agrícolas, cumplan con los requisitos establecidos por la SFP.
“El programa no solo se enfoca en las papas, sino en otros cultivos importantes que utilizamos en nuestros productos, como el maíz, el coco y la avena”, señalan.
La asociación entre Bayer y PepsiCo muestra que es posible tener una agricultura más inteligente y sostenible a través de una relación de beneficio mutuo, y que integre la visión empresarial con los beneficios ambientales y sociales que es nuestro legado para las generaciones futuras.
A su vez, esta alianza puede impulsar que otras empresas alimentarias integren mejores métodos de producción, que apoyen los Objetivos de Desarrollo Sostenible que permitan garantizar una economía que utilice los recursos de manera más eficiente y responsable.